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El álbum de la hemeroteca guarda fotografías de Julio Anguita participando en una cacería con galgos junto a su compañero y camarada Antonio Romero en Humilladero. Eran los tiempos donde este municipio de 3.282 habitantes era un símbolo de la izquierda hasta el punto de que fue conocido como la Marinaleda de Málaga. Y es que durante 44 años esta localidad situada en el centro de Andalucía ha sido un feudo, fundamentalmente, de IU, que gobernó entre 1979 y 2015 con alcaldes como Juan Gutiérrez Vilchez y Félix Doblas, y en las dos últimas legislaturas, del PSOE -la primera con un pacto con el PP y la segunda con un gobierno en minoría-. Una hegemonía a la que ha puesto fin Miguel Ángel Pérez 'El Coronillo', que se ha convertido en el primer regidor del PP de la localidad marcando un hito al poner una pica azul en un territorio hasta ahora dominado por el rojo.
¿Cuáles son las causas que han llevado a este cambio que ha sido incluso puesto como ejemplo por Alberto Núñez Feijóo en una reunión de la dirección del PP a nivel nacional? Para encontrar la respuesta, SUR acudió a Humilladero este jueves, justo el día en que el pueblo se preparaba para iniciar las fiestas en honor a San Juan, para hablar con los dirigentes de los partidos (Miguel Ángel Pérez, su antecesor en la Alcaldía, el socialista Miguel Asencio, y el candidato de Con Andalucía, Rubén Ruiz) y los humilladerenses. Estos últimos apenas quisieron pronunciarse dando como argumento que preferían no hablar en público de política porque «ya sabe usted lo que pasa en los pueblos». Los que sí accedieron a dar su opinión lo hicieron con la condición de que no aparecieran sus apellidos ni ser fotografiados.
De las opiniones y explicaciones recabadas son varias las razones que laten detrás de esta cambio en la alcaldía de Humilladero. Así se han unido factores como la figura del Coronillo, positivamente valorada por sus vecinos más allá de las siglas y que ha provocado un voto no ideologizado sino más personal; la ola a favor del PP a nivel nacional; la enemistad histórica entre el PSOE y Con Andalucía (IU) que ha imposibilitado un pacto; la incorporación de nuevos votantes tras aumentar la población en los últimos años lo que ha llevado a un cambio sociológico e ideológico; o los efectos latentes tras la venta de un suelo municipal para la instalación de una incineradora de residuos tóxicos que promueve una empresa sueca en los terrenos de Royan Bermudo.
«Casi nadie se esperaba que el PP consiguiera la alcaldía ya que se creía que iba a haber un pacto de la izquierda. Finalmente no se produjo y ahora deberían dejar a trabajar a Miguel Ángel», cuenta Juan en las inmediaciones del mercadillo semanal que se celebra junto al parque Salvador Allende. En la travesía Dolores Ibárruri, que da acceso al pueblo desde la autovía A-92, son numerosos los vecinos que desayunan en el restaurante Narciso. En sus inmediaciones, Carmen, que se declara votante de izquierdas, da su opinión: «Es incomprensible que los partidos de izquierda no se hayan puesto de acuerdo». Ya en el corazón del pueblo, en el Hogar del Jubilado A. Morillo Torres 'Antoñito la Chica' los mayores toman un café mientras juegan al dominó y las cartas. En su puerta, Pedro justifica que Con Andalucía no haya pactado con el PSOE: «Hace unos años (se refiere a 2015) los socialistas pactaron con el PP y eso no se ha olvidado; es una herida que aún supura».
Por su parte junto al colegio Nuestra Señora del Rosario son varios los vecinos que llenan garrafas de agua de la cuba que cada lunes y jueves viene desde Antequera ya que el agua del manantial del pueblo no es apta para el consumo. Desde el patio del centro educativo llegan los ecos de la fiesta de fin de curso, mientras que Ana Mari reconoce: «Yo no soy del PP, pero he votado a El Coronillo».
El Coronillo, Miguel Ángel, es saludado por los vecinos en la calle y le desean suerte mientras posa para el fotógrafo bajo un toldo hecho con ganchillo por las mujeres del pueblo. «En el pueblo había ganas de cambio y la gente no quería un pacto del PSOE y Con Andalucía. También soy consciente, porque me lo han dicho, que mucha gente me ha votado a mí y no al PP, al igual que ha habido gente que me ha dicho que no me ha votado porque, en conciencia, no podía coger la papeleta del PP», relata el nuevo alcalde en su despacho, donde reconoce que el día de la investidura llevaba en el bolsillo dos discursos: uno por si salía elegido regidor y otro por si se quedaba en la oposición.
Sobre las causas de su victoria -el PP fue el partido más votado por apenas nueve papeletas de diferencia respecto al PSOE y 110 sobre Con Andalucía-, Pérez, que gobierna en minoría, destaca que la gestión que el PP está haciendo en la Junta también ha influido en el resultado y fija como sus dos grandes retos solucionar el problema del agua y que no se haga la incineradora.
Rubén Ruiz, abogado que debutaba como cabeza de lista de la renovada lista de Con Andalucía, recibe a SUR acompañado del histórico Antonio Romero. En su diagnóstico sobre lo ocurrido, Ruiz hace autocrítica y reconoce que en los últimos años habían estado «despegados» de la ciudadanía y eso les ha penalizado. Respecto a la falta de acuerdo con el PSOE, admite que en la comisión de negociación vetaron como alcalde a Miguel Asencio, a quien responsabilizan de «haber dado alas» al PP, de «no se transparente» en el tema del agua y de su «indecisión» sobre la incineradora evidenciada en el hecho de que «no ha participado en las movilizaciones» contra esta planta.
Miguel Asencio, por su parte, argumenta que se quedaron «sorprendidos» por el veto hacia su figura y afirma que por parte del PSOE hubo voluntad en todo momento por lograr «un gobierno fuerte para Humilladero, no sé si ellos (en referencia a Con Andalucía) querían realmente pactar». El hasta ahora alcalde del municipio defiende la gestión realizada en estos años, que ha tenido una buena candidatura y que se hizo una buena campaña que no ha tenido la recompensa en las urnas que se esperaba mientras que el PP «no ha hecho nada, ha hecho una mala campaña y ha ganado».
Sobre esta victoria, Asencio sostiene que el nuevo alcalde es «muy populista» y añade que el PSOE hará una oposición constructiva pero ha matizado que es «muy complicado gobernar en solitario».
En las conversaciones no se menciona pero está latente la posibilidad de una moción de censura, sin embargo nadie se aventura a hacer pronósticos. Sólo Antonio Romero incide en que Humilladero «sigue siendo de izquierdas» si se suman los votos y concejales del PSOE y Con Andalucía. Pero la realidad es que a día de hoy el PP gobierna un municipio donde tenía pocas esperanzas.
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Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Ignacio Lillo | Málaga
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