El Gobierno no informó a la Junta de la llegada de 360 migrantes a la provincia de Málaga

La llegada de 360 migrantes a la provincia de Málaga, concretamente a Estepona, que se ha coordinado este fin de semana, ha pillado por sorpresa a la Junta de Andalucía. El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones no informó de este movimiento, enmarcado en la estrategia de reducir presión migratoria a Canarias, a ningún responsable de la administración andaluza. Lo ha denunciado este lunes el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, en un acto del 112 en Málaga. «No teníamos conocimiento», ha lamentado para, acto seguido, reclamar una mejor comunicación entre administraciones.

Según Sanz, una vez constatada la llegada de estos migrantes al aeropuerto de Málaga, responsables de la Junta pidieron explicaciones al Gobierno central. Unas explicaciones que llegaron, según precisó, cuando los 360 migrantes ya se encontraban en un hotel de Estepona, al que han sido trasladados hasta que se dictamine su futuro a corto plazo en el país. Cabe recordar que este traslado forma parte del reparto de migrantes que llegan a Canarias.

«No es positivo que no exista esa comunicación y coordinación previa», ha lamentado Sanz, que ha reclamado, además, «transparencia y claridad» sobre esta materia. «Es necesario que estas cosas se comuniquen porque nosotros tenemos ámbitos de competencia, como es la sanidad, en los que esto influye», ha añadido.

Preguntado por si cree que la estrategia que sigue el Gobierno central en el reparto de migrantes por diferentes puntos de la Península Ibérica es adecuada, Sanz no ha querido realizar una valoración al respecto. «Podría decir lo que me parece la política de inmigración, pero lo que creo que toca es mejorar la coordinación sobre este tema», ha detallado.

Más tarde, la portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, también ha abordado este asunto y se ha mostrado crítica por la «falta de información previa» por parte del Ejecutivo central». Reclamamos lealtad institucional. Este es un gobierno que quiere trabajar con transparencia y coordinación. Sin embargo, nos encontramos con actuaciones de este tipo que se producen sin que haya un diálogo y en la opacidad».

España ha dejado claro que el Gobierno andaluz no rechaza de plano la redistribución de migrantes, pero ha exigido que se articule en un marco que esté lejos de los hechos consumados. «Vamos a tender la mano. Andalucía es una tierra solidaria, pero necesitamos que haya colaboración institucional y que haya coordinación», ha sentenciado.

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