El tiempo esta primavera en Málaga está resultando muy extremo, y por eso no extraña que numerosos ciudadanos estén sufriendo catarros y problemas respiratorios, en este carrusel continuo de subidas y bajadas del mercurio para el que tampoco se ve el final. La de hoy ... está siendo una de las jornadas más frías en lo que va de la estación, y la sensación térmica gélida está marcada además por el hecho de venir de días previos especialmente calurosos; así como por el viento de terral de invierno. No en vano, el pasado domingo se registró el récord histórico de la máxima más alta en el mes de abril, con 33,1 grados.
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Para rematar, la nieve ha hecho de nuevo acto de presencia durante la mañana en las zonas altas de la Axarquía y de la Serranía de Ronda. Las nubes han descargado copos sobre Alfarnate y Alfarnatejo, aunque en general no ha llegado a cuajar porque la temperatura superficial no era suficientemente baja. Sí lo ha hecho en las montañas cercanas, en el puerto de los Alazores (1.040 metros), en el límite con la provincia de Granada.
Aunque la máxima de la jornada se produjo de madrugada, a las 00.30 horas (17,9 grados), posteriormente, ya durante el día se ha quedado en el entorno de los 16 grados. «Es un día muy frío, que se acrecienta por el contraste de los anteriores, que fueron muy cálidos, y el viento intensifica la sensación térmica», explica el director del Centro Meteorológico de Aemet, Jesús Riesco. Se trata de terral de invierno, un poniente moderado con rachas fuertes, que viene de la mano de una baja y que ha traído hasta las costas malagueños una masa de aire frío que ha reemplazado a la masa cálida imperante hasta ahora. «Ayer estaba en el interior de la península y hoy sale hacia el mar a través del valle del Guadalhorce».
Al menos, esta vez no se batirá una nueva marca: en el mes de abril, la máxima más baja se produjo el día 17 de 1976, con 11,4 grados; y la mínima absoluta, el día 11 del 1973, con 2,8 grados.
LLuvias el viernes
Mañana continuarán las oscilaciones, primero con un subida fuerte el jueves (marcará 24 grados), que dará paso a una nueva bajada brusca el viernes, otra vez hasta los 18. El viento seguirá siendo de poniente frío.
El comienzo del fin de semana estará marcado por las lluvias, ya que el viernes se descolgará otra baja que Aemet prevé que puede dejar con una elevada probabilidad precipitaciones moderadas en prácticamente toda la provincia. La situación se prolongará durante la primera mitad del sábado, aunque ya menos cuantiosas, y tenderá a mejorar en la segunda mitad. Las temperaturas se quedarán en el entorno de los 21-22 grados.
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