Un frente frío del norte deja casi 20 l/m2 en el interior de Málaga

Donde mayores acumulados está dejando, como suele ocurrir bajo estas circunstancias meteorológicas, es en la comarca de Antequera. Sin ser nada especialmente destacado, al menos se han recogido hasta las 16.00 horas un total de 20 litros por metro cuadrado en Cañete la Real (medidos en 24 horas); 16 en El Torcal; 14 en el río Guadalhorce, a su paso por Archidona y 12 en Bobadilla.

Ese agua beneficiará especialmente a la ciudad de los dólmenes y a la Vega, pero también a los embalses del sistema Guadalhorce (Guadalhorce, Conde y Guadalteba), de los que se abastece la capital. También en el azud de Aljaima, en Cártama, una pequeña presa que aporta los fluyentes superficiales de los que se abastece casi la totalidad de la capital malagueña estos días. Los embalses citados han recogido en torno a 7 l/m2.

Otro punto que se está viendo beneficiado es la alta Axarquía, donde Alfarnatejo ha acumulado 19 l/m2, que ayudarán a aliviar, si quiera levemente, las maltrechas reservas del pantano de La Viñuela (7 l/m2).

En cuanto al nivel de las reservas, pocas mejoras. La Concepción está casi al mismo nivel que la semana pasada, con 15,2 hectómetros cúbicos (26,3% de su capacidad); y lo mismo ocurre con los del sistema Guadalhorce (que suman casi 60 Hm3, entre el 12 y el 20%) y La Viñuela (al 8% con sólo 13 Hm3). En conjunto, las reservas provinciales en las presas están al 16%, con 98 Hm3.

Por desgracia, este ha sido un episodio de precipitaciones muy efímero. Durante la tarde ya sólo se esperan chubascos postfrontales, «típicos de la primavera, que pueden formar arcoiris», en palabras de Escudero. El siguiente episodio húmedo, que podría ser de nuevo débil, se espera para el próximo domingo, aunque todavía hay mucha incertidumbre.

El meteoro destacado durante la segunda mitad de este lunes ha sido el viento, que está soplando con fuerza en la capital y el litoral, y que ha obligado al Centro Meteorológico de Aemet a activar un aviso amarillo en la costa axárquica, donde el poniente puede alcanzar hasta 60 km/h (fuerza 7).

A partir de esta semana comienza la cuenta atrás para el final del ciclo húmedo del actual año hidrológico. Ya sólo quedará marzo como último salvavidas antes del duro verano que se avecina (en abril también suele llover, pero generalmente sólo tormentas débiles y con pocos acumulados).

La buena noticia es que algunos modelos estacionales dan actualmente para el mes que viene una posibilidad de «anomalía positiva», esto es, que sea más húmedo de lo normal, pero habrá que verlo conforme se acerque más. La media histórica de marzo es de 52 l/m2, y la de abril, de 44; si bien es cierto que en los últimos años los meteorólogos observan un cambio de tendencia, hacia mayores acumulados en el final del invierno y el inicio de la primavera en la provincia.