La estabilidad como funcionarios, el deseo de miles de malagueños

Este sábado, más de siete mil candidatos a una plaza de funcionarios docentes de la Junta se examinan en aulas de la Universidad de Málaga. Sobre las ocho de la mañana ha comenzado la citación de los candidatos, a las puertas de las aulas de examen. Sobre la mesa del profesor, folios para escribir y las 'bolas' o fichas con los números de los temas que entran en sorteo. Uno de los opositores se ha encargado de sacar las bolas de una bolsa, un número que varía en función del temario de cada especialidad: se elige un tema de entre tres si son hasta 25 temas, entre cuatro si hay de 26 a 50 temas y se elige entre cinco si son más de 50 temas.

En el tribunal 105, de Educación Primaria, la presidenta, Ana Belén Villena, daba las últimas instrucciones a los opositores. Se encuentra en la Facultad de Derecho de la UMA y es una de las 247 aulas reservadas para los exámenes. Puntualmente, a las 9 de la mañana, se ha procedido al sorteo de los temas y ha comenzado el examen teórico, de dos horas y media de duración.

A partir del lunes día 24 los opositores realizarán la parte B de la fase de oposición, centrada en la aptitud pedagógica y el dominio de las técnicas necesarias para el ejercicio de la docencia, consistirá en la exposición oral de una unidad didáctica.

En las especialidades propias de la Formación Profesional se realizará además un ejercicio de carácter práctico, que tendrá lugar el mismo día 22 en once especialidades y, las cinco restantes una vez finalizada la parte B1 de la prueba.

Las dos partes en que se divide la fase de oposición no tendrán en esta convocatoria carácter eliminatorio, como es habitual, al tratarse de un proceso de estabilización. Los que aprueben la oposición pasan a la fase de concurso, en la que se valoran los méritos del candidato.

Los opositores buscan en su mayoría la seguridad que da un puesto de funcionario en la administración. El gran número de plazas convocadas, 2.826, ha supuesto un número récord de aspirantes, 51.025 en toda Andalucía, de los que 7.613 se examinan en Málaga.

Pero no todos son malagueños, ya que los opositores pueden elegir la provincia en la que examinarse o bien no en todas las capitales hay tribunales para todas las especialidades. Es el caso de Sergio, un cordobés que ha estudiado en la universidad de su ciudad Informática y se presenta por la especialidad de Sistemas y Aplicaciones Informáticas. Está trabajando, pero se ha presentado por tener la experiencia para próximas convocatorias. Para la misma especialidad se presentan Ana y Mireya. En su caso son graduadas en Organización Industrial por la UMA y también es su primera oposición. Vienen a «probar suerte» y por tener «un plan B. Por si falla el trabajo, tener la posibilidad de pasarnos a la docencia».

Alicia Espejo tiene 24 años, ha estudiado Económicas en la UMA y tiene también dos másteres. Trabaja en una ONG en Madrid porque quiere ahorrar dinero para poder prepararse a fondo las oposiciones. «He venido para ver cómo es una oposición y quitarme esta incertidumbre para próximas convocatorias», señala.

Macarena es de Estepona y se presenta por segunda vez. Ya aprobó en la oposición anterior, pero no consiguió plaza y tampoco la han llamado para sustituciones. Sabe que en esta también será difícil, pues la fase de concurso tiene más peso y es una convocatoria especial para estabilización de interinos. Trabajando, es difícil prepararse a fondo, aunque dice llevar «más o menos bien, para defenderme», diez de los 25 temas a examen.

Ana, algecireña, sí ha conseguido entrar en la bolsa de sustituciones. Representa el perfil típico del interino: con familia, un hijo pequeño, su último destino ha estado a 450 kilómetros de su hogar, Pulpí, en Almería, ya limitando con Murcia. Viene preparada, pero reconoce que será muy complicado. «En mi tribunal hay dos plazas, estamos muchos candidatos y compañeros con mucho tiempo de servicio, por lo que habrá una gran incertidumbre hasta el final».

Por los pasillos y patios de la Facultad de Derecho pasea Javier con su bebé de dos meses, Noa. La madre, Saray, está examinándose para Educación Primaria y tendrá que salir a dar de mamar a su pequeño. Hay aulas de lactancia en todos los centros universitarios, hasta 17, aunque Javier dice que se sentará en un banco, junto a la puerta de entrada de su aula de examen. Saray está trabajando, con distintas sustituciones y alguna vacante (para todo el curso), pero busca la estabilidad de una plaza de funcionario. Javier explica que en las anteriores oposiciones a Maestros se quedó a un puesto de conseguir plaza. Prepararse durante el embarazo y ya con su bebé nacido “ha sido duro, sin tiempo apenas para estudiar”, dice el marido. Pero el objetivo, la tranquilidad que proporciona un trabajo seguro, bien merece el esfuerzo.

La Consejería ha ofertado un total de 2.826 plazas de estabilización. Del total de puestos de ingreso, 2.030 corresponden al Cuerpo de Maestros; 660 al de Profesores de Enseñanza Secundaria; 95 al de Profesores de Música y Artes Escénicas; 33 al de Profesores Especialistas en Sectores Singulares de Formación Profesional; 4 al de Profesores de Artes Plásticas y Diseño y otras 4 son para el de Maestros de Taller de Artes Plásticas y Diseño. Estos puestos proceden de cuatro decretos de oferta de empleo público. Es la primera vez que se realizan a la vez pruebas para los cuerpos de Maestros y de Secundaria. Con este proceso junto con el concurso de méritos realizado en el 2023, se culmina la estabilización del personal docente interino de Andalucía, con un total de 6.113 plazas.