Los embalses de Málaga duplican el agua que tenían hace un año

Sin poder todavía dar la sequía por zanjada en Málaga, algo para lo que harían falta varios días de lluvias intensas como las de ayer, lo cierto es que hay motivos para ser optimistas. Y el primero es que la situación de las reservas hídricas es hoy claramente mejor que la había hace justamente un año.

Tanto, como que los embalses acumulan justo el doble de agua que hace un año. El 4 de marzo de 2024, la provincia estaba sumida en las restricciones por una profunda sequía, con sólo 98 hectómetros cúbicos. A día de hoy, los mismos reservorios almacenan 198 Hm3. Y ello, precisamente, aporta más tranquilidad pues se produce a las puertas de la temporada alta de Semana Santa, primero, y del verano, después.

Especialmente llamativa es la situación en la Costa del Sol, que tiene ahora el triple de reservas: La Concepción ha pasado de tener poco más de 15,3 Hm3 a 44, lo que la sitúa al 77% de su capacidad... Y con tendencia creciente.

Lo mismo ocurre en el caso de la capital malagueña, donde el pantano del Conde de Guadalhorce ha pasado, merced a la dana, de tener menos de 13 Hm3 a 43 (al 64,5% de su capacidad máxima), según los datos recabados de la Red Hidrosur a última hora de la tarde de ayer (estas cifras varían al alza con cada actualización). También triplica-

Y, aunque en la Axarquía apenas ha caído nada en los últimos días, también destaca la situación de La Viñuela, que ha pasado de una situación extrema, con 13 Hm3, casi triplica esta cifra hasta los 36 actuales, que dan cierta holgura a la comarca para no tener que llevar a cabo nuevas restricciones de consumo doméstico (aunque sí al riego de los cultivos).

Y es que esta última Depresión Aislada ha acertado de lleno en uno de los entornos donde el agua es más necesaria y mejor se aprovecha. La borrasca fría se ha situado sobre el alto Guadalhorce, donde están las cabeceras de los embalses del sistema homónimo, y que son, precisamente, los que abastecen a la ciudad.

El que tiene más cantidad embalsada es el Conde de Guadalhorce, con 43 hectómetros cúbicos; seguido del Guadalteba, con 37,4 Hm3, y el Guadalhorce (18,5 Hm3). Además, Casasola y El Limonero, que están en el entorno de la capital, apenas se han movido (11,5 y 7 Hm3, respectivamente). Este volumen garantiza agua para prácticamente dos años de consumo en la capital malagueña.

La segunda clave es que varios de los afluentes del Guadalhorce van todavía bastante cargados de agua, por lo que las escorrentías van a seguir todavía alimentando a los pantanos durante varios días más. El nivel del Turón, por ejemplo, que ha llegado a estar en alerta roja de emergencia sigue siendo apreciable, 12,21 metros cúbicos por segundo. Es un caudal más de diez veces superior al que necesita Málaga capital.

Las copiosas lluvias de las zonas de Genal, Sierra Bermeja, Sierra de las Nieves y Serranía de Ronda alimentarán durante varios días de manera previsible al embalse de La Concepción, que recoge los aportes del Verde y del triple trasvase Guadalmina-Guadaiza-Guadalmansa.

Menos probable es que Guadalhorce y Guadalteba aporten demasiado a los embalses homónimos, a no ser que el régimen de lluvias de los próximos días descargue bien en esta cuenca. Y lo mismo pasa con el Campanillas (Casasola) y Viñuela.

Y la tercera clave es que seguirá lloviendo. A la dana que está afectando ahora, y que se reactivará hoy y mañana, le sucederá desde el viernes y hasta el domingo (incluso hasta el lunes) una borrasca atlántica, que dejará aguaceros abundantes y generalizados en toda la provincia, que ayudarán a seguir apuntalando las reservas en las siguientes semanas.

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