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Tener un salario ya no es una llave para el acceso a la vivienda en Málaga. Con los precios absolutamente disparados y un sueldo medio que sigue entre los más bajos del país, cada vez es más amplia la franja de población trabajadora que no puede acceder ni a la compra ni al alquiler de una vivienda. CC OO ha elaborado un informe que cruza el último informe de salarios elaborado por la Agencia Tributaria y la estadística de compraventa de viviendas y concluye que hay más 291.000 personas asalariadas que ni pueden comprar, ni alquilar una vivienda; ni siquiera alquilar una habitación. Se trata del colectivo de trabajadores cuyos ingresos anuales se quedan por debajo del salario mínimo (lo cual ocurre porque trabajan a jornada parcial o porque no trabajan todos los meses del año), que representan el 42,3% del total de población asalariada de Málaga.
Este colectivo de trabajadores de bajos ingresos tiene una renta media de 569 euros mensuales. «Teniendo en cuenta que en Málaga capital es muy difícil encontrar una habitación por menos de 400 euros, es difícil encontrar una vivienda de alquiler por debajo de los 1.000 y el precio medio de compra de la vivienda libre está en 2.400 euros por metro cuadrado, este amplio porcentaje de las personas asalariadas de nuestra provincia no pueden adquirir una vivienda de ninguna de las maneras», afirma el secretario general de CC OO Málaga, Fernando Cubillo. El sindicato califica de «problema estructural y de emergencia social» la situación del acceso a la vivienda en Málaga. El sindicato apoya la manifestación convocada para el sábado en Málaga en defensa del derecho a la vivienda y contra el «actual modelo de ciudad».
«Tener empleo hoy en Málaga ya no te garantiza poder acceder a una vivienda, en un contexto social donde el 42,3% de la población asalariada vive en riesgo de pobreza salarial con salarios medios anuales que no llegan a los 7.000 euros. Con lo cual, en Málaga, un joven menor de 35 años necesitaría ahorrar su salario íntegro durante 3,6 años para acceder a la compra de una vivienda», asegura Inmaculada Sánchez, secretaria de Políticas Sociales de CC OO Málaga. Con una media salarial en torno a los 13.268 anuales, los jóvenes menores de 35 años necesitarían 3,6 años de sueldo íntegro para pagar la entrada de una vivienda.
El sindicato recuerda que tampoco lo tienen fácil quienes ganan entre 14.000 y 28.000 euros, porque sólo podrían adquirir una vivienda con hipotecas «que excederían su vida laboral». Según Cubillo, tan sólo un 20% de trabajadores malagueños cuenta con un salario suficientemente alto para comprar o alquiler sin destinar más del 30% de su renta a la vivienda.
Cubillo opina que el decreto que el gobierno andaluz está preparando para afrontar la crisis habitacional «no da respuesta a las necesidades de vivienda de las personas malagueñas». Es, en su opinión, «un decreto pensado para que las empresas sigan ganando dinero y para que vengan a Málaga personas con recursos económicos a obtener beneficios pero no a vivir».
Los representantes de CC OO han llamado la atención sobre los colectivos vulnerables, que sufren con más intensidad la barrera de acceso a la vivienda. «En Málaga ser joven, mujer, hogar monoparental, persona con discapacidad o immigrante es sinónimo de exclusión residencial. Todo estos factores que influyen en una falta de horizonte que presentan nuestros jóvenes para vivir de forma digna e independiente está afectando a su salud mental, un problema de salud que en el caso de la sanidad pública en Andalucía no está dando respuesta», afirman los portavoces del sindicato.
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