Los delitos de odio casi se triplican en Málaga en un año arrastrados por el aumento de las denuncias del colectivo LGTBI

A pesar de que en el conjunto nacional los delitos relacionados con la xenofobia y el racismo lideran esta clasificación, en Málaga los que encabezan la lista son aquellos denunciados por el colectivo LGTBI, es decir, los que tienen que ver con la orientación sexual y la identidad de género. Del total de los 81 delitos denunciados, 20 pertenecen a esta categoría.

En segundo puesto sí aparecen ya los delitos relacionados con el racismo y la xenofobia, que pasan de 8 a 19. En tercer lugar, con 17 denuncias, se sitúan aquellos ligados a la discriminación por sexo y género. Estas son las tres tipologías más recurrentes, aunque también se registran otras con casos puntuales, como antigitanismo o antisemitismo.

Tal y como explican desde el Ministerio del Interior, los delitos de odio se caracterizan por acciones ilegales impulsadas por «prejuicios e intolerancia hacia individuos con características o condiciones (reales o percibidas) distintas a las del perpetrador», como pueden ser la raza, etnia, nacionalidad, orientación sexual, identidad de género, creencias religiosas o políticas, discapacidad, entre otros aspectos reconocidos en el Código Penal español. Desde el Ejecutivo recuerdan que la selección de las víctimas se basa en estas diferencias inherentes. «Por lo tanto, un delito de odio puede dirigirse contra personas o grupos, así como contra sus bienes, degradando la dignidad humana y obstruyendo el ejercicio de derechos fundamentales, fragmentando así el tejido de una sociedad democrática y diversa donde el pluralismo y la igualdad son esenciales».

Uno de los datos que más llaman la atención con respecto a Málaga, es la cantidad de detenidos/investigados. El informe separa los hechos conocidos (denuncias), el número de víctimas, la cantidad de hechos esclarecidos y las citadas investigaciones. Si el total son 81 delitos en un año, apenas se contabilizan 25 detenidos o investigados, lo que demuestra que este tipo de delitos, tal y como repiten los expertos, son muy difíciles de investigar, especialmente si éstos ocurren en el ámbito digital.

El racismo, el delito más recurrente en España

La cifra total de delitos e incidentes de odio registrada en España el año pasado fue de 2.268 hechos, lo que supone un aumento del 21,35% en relación con 2022. Del informe se desprende que los hechos conocidos este pasado año han aumentado en todos los ámbitos, menos en el de discriminación por razón de enfermedad, que se ha mantenido igual. El mayor aumento porcentual se ha producido en los delitos de odio contra personas con discapacidad, antisemitismo y antigitanismo, por este orden. Sin embargo, en términos totales el racismo y la xenofobia se mantienen como el delito de odio más recurrente (856 casos) con un aumento porcentual del 13,38 por ciento, seguido del delito contra la orientación sexual y la identidad de género (522 en total), con un aumento de casi el 14 por ciento.

Aunque el informe no lo provincializa, en términos del conjunto de España la mayor victimización se produce en personas del sexo masculino (59,20%), y el grupo de edad con más víctimas está entre los 26 a 40 años (32,95%). Los menores de edad constituyen el 14,82% del conjunto de las víctimas en 2023, una cifra mayor a la del año 2022 (12,16%). «Del análisis realizado sobre la distribución global de incidentes conocidos por ámbito y sexo, las víctimas de ambos sexos presentan el porcentaje más alto en racismo/xenofobia, al igual que los años anteriores», recalca el informe.

Víctimas y agresores

El informe explicita que en la distribución de las víctimas según su nacionalidad, en primer lugar se encuentran los españoles con el 62,15% del total de victimizaciones registradas, siendo la cifra de víctimas extranjeras un 37,85%. Dentro del conjunto de las víctimas de nacionalidad extranjera, las que contabilizan valores más elevados son las procedentes de Marruecos (8,34%), Colombia (4,85%) y Venezuela (2,29%).

Con respecto a los agresores, la realidad en función de los datos describe que los hombres presentan un porcentaje muy elevado de las detenciones e investigados por delitos de odio efectuadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, con un 78%. Los ámbitos que recogen mayor incidencia son racismo/xenofobia y orientación sexual e identidad de género. Por nacionalidades, los españoles ocupan el 87,56% del total de los agresores.