Su pasión por el fútbol y la carrera continua, que sigue practicando con asiduidad, lo llevó en primera instancia a estudiar magisterio de Educación Física. Más tarde, por vocación, acabó dando el salto a la Fisioterapia. Ahora, a los 47 años, casado y con tres ... hijos, Cristóbal García Fernández ejerce junto a María José Fernández Gómez en una luminosa y bien equipada sala de Fisioterapia en la que se respira sosiego y empatía, en el centro de salud de Alhaurín el Grande. Con un entusiasmo jovial, confiesa a boca llena sentirse feliz en su trabajo, con independencia de las dificultades con las que ha de lidiar en el día a día. Firme partidario de una educación en salud para las prácticas deportivas que propicien una vida más sana, desgrana algunas claves y consejos para evitar disgustos cuando, en vacaciones, tratemos de exigir al cuerpo un rendimiento no acorde con la vida sedentaria que solemos llevar el resto del año.
Publicidad
–¿Qué tipo de lesiones son más frecuentes en verano?
–Casi siempre son un tipo de lesiones causadas por un uso excesivo de la musculatura, como sobrecargas musculares, contracturas y en menor medida lo que se denomina rotura de fibra. A veces esta se produce por los sobreesfuerzos que hacemos, porque parece que queremos hacerlo todo en los tres meses de verano, cuando durante el resto del año nos hemos olvidado de que tenemos un cuerpo que cuidar.
–¿Cómo podemos prevenirlas?
–Normalmente este tipo de lesiones podríamos prevenirlas tratando de trabajar desde el punto de vista físico durante todo el año. Es decir, someter a nuestro cuerpo a una actividad física moderada para que en verano no nos encontremos con sorpresas desagradables.
–¿Cuánto tiempo sería necesario dedicar a la preparación física si pretendemos darle 'caña' al cuerpo en las vacaciones?
–Las cargas de trabajo en los planes de verano que lleva mucha gente en torno a abril y mayo a veces son excesivas y en muchas ocasiones pueden llevar incluso a lesiones. Es mucho más beneficioso mantener de continuo una práctica de tres o cuatro horas semanales para evitar sorpresas a la hora de hacer la operación biquini.
Publicidad
–¿Son los pies la parte más vulnerable del cuerpo por el uso de chanclas y calzado ligero?
–En verano solemos insistir mucho en que el cuidado de los pies parece que se descuida, sobre todo por el tipo de calzado. Debemos en la medida de lo posible evitar el uso de un calzado que deje muy al aire libre el pie. Entendemos que para ir a la playa o por el paseo marítimo se utilicen las chanclas, pero de manera habitual deberíamos usar un tipo de calzado que sea cerrado y tenga capacidad de contener el pie. No de tenerlo aprisionado, sino de contener el pie para evitar torceduras innecesarias, lesiones en los dedos y lesiones a nivel de la planta del pie, porque con el uso habitual de las chanclas estamos sobrecargando esta zona y estamos comprando papeletas para provocar lesiones tanto en la planta como en el talón de Aquiles.
–Si me he hecho un esguince y quiero volver a andar pronto, ¿mejor me busco un fisio cuanto antes o es suficiente la tradicional prescripción médica de relajante muscular y reposo?
–Nosotros somos siempre partidarios de contar con la opinión inestimable de carácter diagnóstico del facultativo. Si se produce una lesión importante que necesite la revisión de un médico, es mejor contar con ese apoyo. Sólo si vemos que en un momento dado la persona ha sufrido una lesión menor, ni siquiera es necesaria la visita al facultativo porque en esguinces de carácter leve sabemos que con hielo o con un vendaje de carácter funcional podemos seguir avanzando, y en ese tipo de situaciones basta con el fisioterapeuta para abordar el problema.
Publicidad
–¿Qué hemos podido hacer mal si después de un día de playa volvemos a casa con dolor de cuello o de espalda?
–Muchas cosas... Una imagen muy típica en la playa suele ser la de los padres y niños cargados de sillas, la mesa, las sombrillas, la nevera azul de toda la vida hasta los topes... Lo ideal sería hacer varios viajes desde el coche o bien usar un carrito. Yo soy muy partidario porque para eso se inventó la rueda, para poder transportar las cosas pesadas, y tenemos que educar en prevención: hay que usar carritos para el transporte, repartir la carga entre dos, sentarse en ángulo recto, no coger peso girándose hacia atrás mientras estamos sentados...
–¿Qué les diría a esos bañistas que acostumbran a tumbarse sin apoyar la parte baja de la espalda, a los que clavan la sombrilla sin flexionar las piernas y a los que se cargan con todo en un solo brazo?
Publicidad
–Como cuando uno está en traje de baño no deja de llevar puesto encima mentalmente la bata de fisio, a veces en la playa le comento a mi mujer (enfermera de urgencias), que por ahí va un potencial paciente. En muchas ocasiones, aunque sabemos por los cursillos de higiene postural, incluso por los anuncios que vemos en la tele, en prensa y demás, que debemos flexionar las rodillas para poder hacer levantamientos de peso, y mantener una postura de la columna erguida al sentarnos, en ángulo recto para mantener la forma armoniosa de nuestro cuerpo, parece que nos olvidamos. En la medida en que ves ciertas posturas en la playa estás viendo que estás sometiendo a estrés tendones, ligamentos, parte de la estructura articular, con lo cual más que ir a descansar a la playa, ves que el personal, por la forma en que descansa, por la forma en que se sienta, pues está provocando un daño de carácter muscular y articular que, mantenido durante determinado tiempo, puede causar una lesión.
–¿Y qué me dice de esos arrebatos competitivos en la piscina encadenando largos sin calentamiento ni estiramiento que valga?
–Con esas carreritas que habitualmente se ven en la playa o en la piscina se están exponiendo en ocasiones a una posible rotura de fibra, un pequeño sobreestiramiento, a un alargamiento anormal de la musculatura, con lo cual pueden estar provocando sin quererlo una lesión a nivel del hombro, del abdomen o de la parte trasera de los muslos, que suele ser una musculatura que más bien se encuentra acortada. Si se quiere alargar y acortar para nadar, se puede someter a lesión si no hay entrenamiento previo. Así te expones a una posible lesión y a hacer que tu verano sea un poquito más complicado, porque tener que recuperarse de un daño de ese tipo puede llevar entre una semanita o diez días con la aplicación de las técnicas habituales para limitar el dolor: aplicar hielo si se trata de un traumatismo, luego calor local… El carácter preventivo de nuestra profesión aconsejaría, insisto, una actividad previa para evitar esas situaciones.
Publicidad
–¿Entrañan algún tipo de riesgo esos masajes exóticos que nos ofrecen a pie de playa?
–El riesgo que entraña es el riesgo del intrusismo profesional. Lógicamente para la aplicación de técnicas de carácter físico, el profesional cualificado en España es el fisioterapeuta, con lo cual ponerse en manos de una persona que no está cualificada para tratar una patología supone poner en riesgo tu salud. Que son técnicas que se aplican de manera privada y es barato, lo que tú quieras, pero estás poniendo en riesgo tu salud porque la dejas en manos de una persona que no tiene una cualificación para desarrollar ese trabajo.
–¿Qué se le pasa por la cabeza cada vez que oye a alguien identificar a un fisio con un masajista?
–Yo quisiera hacer hincapié en que la comparación de nuestra profesión con simples masajistas es un craso error y una imagen simplista. Es decir, dentro de nuestras técnicas de carácter físico para poder rehabilitar las patologías que vemos diariamente, una de las técnicas es la aplicación de los masajes, pero existen muchísimas otras y un amplio abanico: estiramientos, ejercicios con pesas, con barra, la aplicación de calor, ultrasonidos…
Noticia Patrocinada
–¿Por qué muchos ven la fisioterapia como algo exclusivo del deporte de élite o de quienes tienen la mala pata de sufrir algún daño en tendones o articulaciones?
–No creo que se trate de una profesión de élite y para la élite. Es una profesión que tiene distintos niveles de actuación, también la privada, pero desde el sistema público se está haciendo cada vez más accesible al conjunto de la población, se va viendo poco a poco la ampliación de nuestra plantilla en el sistema sanitario y se han dado pasos en forma de salas de fisioterapia bien equipadas.
–¿Cómo se enfoca la rehabilitación de un paciente, con protocolos según el tipo de lesión que sufra esa persona o es específico?
–Nosotros tratamos en la medida de lo posible dar un tratamiento personalizado. Ante un mismo tipo de patología en función también de los objetivos, edad, del estado físico e incluso de salud mental de la persona, debemos individualizar lo más posible su tratamiento, aunque contemos con numerosos protocolos ante una misma patología.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.