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Tras casi dos semanas asimilando la nueva situación política de Ciudadanos tras el desplome electoral del 10-N y la dimisión de su líder, Albert ... Rivera, Guillermo Díaz, diputado electo por Málaga, rompe su silencio en una entrevista con SUR donde reconoce que los primeros días no fueron fáciles y que le afectó personalmente la marcha de Rivera; subraya que Inés Arrimada es la persona «idónea» para tomar las riendas de la formación; y se muestra optimista sobre el futuro del partido liberal.
–¿Qué explicación da al batacazo de Ciudadanos en las urnas?
–¡Ojalá pudiera dar una explicación! Han sido muchos factores. Ha sido una tormenta perfecta.
–¿Cuáles son esos factores?
–Si preguntamos a cinco personas diferentes nos van a decir cinco cosas distintas. Hay quien nos va a decir que fue por la política de acuerdos, otro dirá que por no llegar a acuerdos, otro, por confundir al electorado,... Nosotros, a diferencia de otros partidos, hacemos autocrítica y reconocemos que fueron errores de carácter estratégico no programático.
–Ese intento de dar el 'sorpasso' al PP como partido hegemónico del centro-derecha, ¿en qué medida les ha perjudicado?
–Esa es una de tesis y se ha conformado una percepción general de que nosotros hemos buscado ese 'sorpasso', pero a mí internamente nunca me dijeron que el objetivo era adelantar a tal o cual partido. Nosotros tenemos un proyecto propio y en todas las elecciones hemos salido a ganar; a ganar a todos, no a un sólo partido.
–Había también una percepción de que el partido había dejado el centro y se había derechizado. ¿Eso ha influido?
–No. Todo depende de lo que uno crea que define a un partido. Para mí, a un partido lo define su programa y el de Ciudadanos no se ha derechizado porque sigue siendo un programa liberal, de centro y reformista.
–¿Ha traicionado Ciudadanos a sus votantes?
–No. Hemos hecho siempre lo que dijimos que íbamos a hacer. La traición sería hacer lo contrario de lo que dices que vas a hacer. Lo que hay es una desafección de una parte importante del electorado con Ciudadanos.
–¿Y por qué se da esa desafección?
–Se dio una coyuntura donde la polarización de los discursos en la política hizo que la moderación, la centralidad, perdiera voz.
–¿Cómo se revierte la situación?
–De entrada, haciendo autocrítica y asumiendo los cambios.
–¿Autocrítica y qué más?
–Habrá cambios estructurales y un cambio en la dirección, que deberá definir la nueva estrategia.
–¿Ciudadanos afronta una refundación?
–No estamos ante una refundación porque los principios de Ciudadanos son los mismos: hacer frente al nacionalismo, luchar contra la corrupción y luchar por la unidad, la igualdad y la libertad de los españoles. Estamos ante un cambio importante.
–¿Inés Arrimadas es la persona idónea para dirigir Ciudadanos?
–En mi opinión, sí, pero hay unos procesos garantistas y muy democráticos que dan la oportunidad a cualquier afiliado que quiera de montar una candidatura.
–¿Por qué es la persona idónea?
–La trayectoria política que tiene de hacer frente en la parte de España que era más difícil defender la unidad y la libertad (Cataluña), la ha convertido no sólo en referente de los votantes de Ciudadanos sino que millones de españoles se ven representados en Inés. Y luego, es una persona muy trabajadora, honesta y valiente.
–¿Ciudadanos puede sobrevivir sin Albert Rivera?
–Va a sobrevivir.
–¿Cómo vivió la dimisión de Rivera y que abandonara la política?
–A nivel personal no lo he pasado bien porque le tengo estima política y personal. Es un hombre a quien le debo mucho porque me ha enseñado capacidades que yo tenía sin explotar. Su marcha a mí no me resultó fácil. ¿Qué hizo lo correcto? Hizo lo correcto en un país donde nadie hace lo correcto en ese aspecto. Él, Juan Carlos Girauta, Fernando de Páramo y José Manuel Villegas se van y se van a la sociedad civil. ¿Esto que significa? Significa que las ideas se llevan a la práctica. Nosotros dijimos que veníamos a la política desde la sociedad civil y volvemos a la sociedad civil.
–Esa marcha de algunos de los principales dirigentes da la sensación de desbandada.
–No. Es una dirección del partido que asume errores y se va. Son cuatro personas importantes que se van, pero hay mucho fondo de armario en Ciudadanos; hay equipo.
–¿Teme una 'upeydización' de Ciudadanos?
–No. La situación es radicalmente diferente.
–¿Va a seguir en política?
–He sido votado por los malagueños y tengo que representarlos en el Congreso de los Diputados.
–Es decir que va a seguir en la política y en Ciudadanos.
–Yo si sigo en política será en Ciudadanos.
–¿Se ve en la futura dirección nacional?
–No me corresponde a mí decirlo.
–¿Está en ese fondo de armario que dice que tiene el partido?
–Yo y todos los militantes estamos en este fondo de armario.
–¿Ciudadanos se debe abstener para facilitar la investidura de Pedro Sánchez?
–Pedro Sánchez plantea como vicepresidente a un tipo que cree en el derecho de autodeterminación y que quiere llegar a acuerdos con todos los nacionalistas de España. Eso es, automáticamente, incompatible con nosotros. Hacer vicepresidente a Pablo Iglesias no es algo que consideremos bueno para España.
–¿No se van a abstener?
–Votaremos en contra.
–¿Qué le parece el preacuerdo de gobierno de PSOE y Unidas Podemos?
–Una mala noticia para España, que demuestra la frivolidad con la que conciben el Gobierno de España las personas que están formando Gobierno. En abril no lo hicieron porque ya tenían contratada la publicidad para una repetición electoral. Lo que no consiguieron en tres meses lo consiguieron en 24 horas, más débiles todos y dependiendo más de los nacionalistas, que están salivando con lo que se nos viene.
–La situación interna de Ciudadanos, ¿ afectará a la estabilidad de instituciones como el Ayuntamiento de Málaga, la Diputación Provincial o la Junta donde ustedes son claves para la gobernabilidad?
–No. Nosotros tenemos acuerdos firmados y somos gente cumplidora. Es más ya hemos gobernado con acuerdos y los hemos cumplido. Tenemos ahí bastantes credenciales para garantizar que vamos a cumplir.
–¿Teme que pueda haber integrante de Ciudadanos que puedan cambiar de partido o a los grupos de no adscritos y desestabilizar instituciones?
–No. El lunes tuvimos una reunión en la sede con los afiliados y cargos públicos y hubo un cierre de filas importantes de todos. Sabemos que estamos en una situación de cambio pero también sabemos que un fracaso es una oportunidad.
–¿Qué le diría a un votante de Ciudadanos que el 28 de abril les votó y no lo hizo el 10 de noviembre?
–Que por favor esté atento a lo que viene. Viene una etapa nueva muy esperanzadora, con un liderazgo fuerte y de la asamblea saldremos reforzados. Seremos más Ciudadanos que nunca.
–Se le ve optimista.
–Sé que nos espera un trabajo duro, pero también sé que hay muchas personas que quieren volver a confiar en nosotros. Por eso soy optimista.
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