Cinco municipios de Málaga deberían cerrar tras las recomendaciones de Sanidad

Y en esa tesitura se encuentran cinco municipios de Málaga, según la estadística actualizada a día de hoy ofrecida por la Consejería de Salud. La encabeza Guaro, que con 2.260 habitantes contabiliza 67 positivos por PCR en las últimas dos semanas y eleva su tasa de contagios hasta los 2.964, una cifra muy superior a los 500 tomados como referencia. Le siguen Jimera de Líbar, Sayalonga, Sierra de Yeguas y Serrato, con tasas de 1.075, 832, 687 y 628, respectivamente.

El anuncio del responsable de Sanidad ha cogido por sorpresa a algunos alcaldes de la provincia afectados, que no salen de su asombro con la noticia. «Los políticos nacionales no tienen ni idea de lo que pasa en los pueblos pequeños. Si aquí en Jimera de Líbar, con 372 habitantes y solo cuatro casos, tenemos que cerrar todo el pueblo, esto es de locos», lamenta su alcalde Francisco Javier Lobo. Asegura a este periódico que los contagios afectan a solo una familia, una madre, sus dos hijos y la abuela y desde que se tuvo conocimiento el resto de la población se ha «autoconfinado». «Esto es como una familia, todos cuidamos del resto», puntualiza Lobo, quien asegura que las medidas se están cumpliendo a rajatabla. «Tenemos cuatro bares y dos han cerrado por responsabilidad», recalca.

En esa misma línea se ha pronunciado el alcalde de Serrato, municipio de 477 habitantes, que registra tres positivos. "Entendemos que la tasa se dispare, pero con solo tres vecinos contagiados me parecería excesivo tener que cerrar todo el pueblo", asegura el regidor Francisco López, quien cree que sería muy difícil que la situación se descontrolase ahora mismo.

En el caso de Guaro, con la tasa más alta de Málaga, comparten la misma idea. «Tenemos más casos, pero la mayoría se concentra en una residencia de mayores; solo dos están fuera», aclara su regidor José Antonio Carabantes, quien afirma que no es lo mismo un brote controlado que los casos se den en la población en general. Por esta razón califica de «exagerada» la medida de Sanidad de cerrar el municipio. Y es que desde que se confirmara el brote en la residencia Domusvi Sierra de las Nieves hace diez días, el Ayuntamiento optó por cerrar espacios públicos, como algunas instalaciones deportivas, y solo atender con cita previa las gestiones municipales.

Quien no da crédito a los datos ha sido la alcaldesa de Sayalonga, Sagrario Fernández. «Actualmente, solo tenemos cuatro casos activos, tres residentes extranjeros y yo misma, por eso no se puede consentir que la Consejería siga contabilizando a día de hoy 14 casos. No es así y, por tanto, no superamos la tasa de referencia de 500 contagios por 100.000 habitantes indicada para tener que cerrar el pueblo», explica Fernández. Este municipio llegó alcanzar un pico de 22 infectados, que llevó a la regidora a pedir a sus vecinos que solo abandonasen el domicilio familiar «en casos de necesidad imperiosa».

En el caso de Sierra de Yeguas, donde la tasa es de 687 (23 casos positivos por PCR sobre 3.346 habitantes) y debido a la evolución del rebrote la Covid-19, el Ayuntamiento ha adoptado una serie de medidas que entran en vigor desde hoy, 25 de septiembre. Tienen como objeto contener la expansión del coronavirus, especialmente en los espacios públicos. Así, se ha establecido el cierre de las instalaciones deportivas fuera del horario escolar y se ha acordado retrasar el inicio de las actividades municipales de este ámbito. Además, han reducido al 50% el aforo de la biblioteca y del Centro Guadalinfo. Asimismo, «se tomarán las actuaciones necesarias para evitar aglomeraciones de personas en espacios públicos como plazas, calles o el mercado de abastos. Entre ellas la suspensión del mercadillo de venta ambulante de los jueves»

El decreto de Alcaldía también establece varias recomendaciones a negocios minoristas de Sierra de Yeguas y Navahermosa como evitar las concentraciones en espacios cerrados y marcar itinerarios de recorridos internos. En el caso particular de la hostelería, desde el Ayuntamiento han pedido que se evite el servicio de barra y sólo se atienda en las mesas, sean en el interior o en la terraza.

Todas esta medidas van encaminadas a frenar el número de contagios en un municipio donde la situación es "alarmante", según califica el alcalde de Sierra de Yeguas, José María González. "Pese a que este municipio no se tarda más de diez minutos en recorrerlo de punta a punta, yo no vería mal que pudiésemos limitar la movilidad, tal y como dice Sanidad, y solo se saliese de él para ir a trabajar o a estudiar", defiende González, que se desmarca de la posición del resto de alcaldes afectados por la medida. Admite que la incidencia en Sierra de Yeguas es similar a la de algunos barrios de Madrid y por eso ve acertadas más restricciones. "Sería una medida pedagógica, una especie de castigo del que aprender para que nadie se relaje", declara González, en clara referencia a un vecino que pendiente del resultado de la prueba PCR se fue de fiesta "con el riesgo que eso conllevó para el resto de la población".