Secciones
Servicios
Destacamos
El segundo bloque de 'La Alameda' giró en torno a la movilidad. En el panel, el exdiputado de CS Guillermo Díaz; los profesores universitarios Laura Teruel y Alberto Montero (exdiputado de Podemos); el periodista de SUR Ignacio Lillo y, como expertos, el consultor e ingeniero Carlos Miró y el director gerente del Consorcio de Transportes de Área Metropolitana de Málaga, Javier Berlanga.
Miró señaló que hace ya treinta años que se hablaba de Área Metropolitana y que hemos conseguido el billete único de Renfe con 20 años de retraso. «Estamos aplicando las políticas metropolitanas a trompicones. Dimos un gran salto con la estación María Zambrano y estamos viendo que se queda pequeña. Tenemos que empezar a planificar. Van muy rápidos los problemas de congestión y muy lentas las soluciones, incluso las ideas, incluso vemos lejano el tercer carril en la ronda Este. El transporte público es mucho más importante de lo que pensábamos, no es un lujo, es una necesidad».
Berlanga reconoció que las grandes infraestructuras tardarán muchos años. «La apuesta tiene que ser usar el transporte público. Si no lo hacemos cómodo, la gente seguirá apostando por el coche. Hacen falta transportes de más capacidad », dijo, y abogó por carriles bus-VAO, 'Bus Rapid Transit', autobuses de más capacidad y soluciones intermodales.
Montero explicó que el centro de gravedad de la actividad ha cambiado en Málaga. Antes la gente salía a trabajar y ahora se han invertido los flujos. «Eso vuelca unas infraestructuras que son centrífugas. Ya no es la segunda residencia, yo no el caos del fin de semana, mucha gente vive en el área metropolitana. Esto es consecuencia del peso económico de la ciudad y que no ha sabido adoptar medidas como oficinas o transporte», ha dicho y ha echado de menos políticas públicas y de más trasladar al ciudadano problemas y se refirió a la idea de Pere Navarro (DGT) de ir dos en un coche.
Laura Teruel mostró su sorpresa por la inacción en los últimos años. Aludió a los atascos y ha apostado por un carril reversible y al uso del coche compartido. «Hay que usar el transporte público, Málaga es una metrópoli rodeada de otras ciudades. Esto no ha sido súbito e inesperado».
«Estas son las dolencias del éxito», dijo Guillermo Díaz. «Seamos más optimistas, peor sería llorar porque no viene nadie. Es un problema acordeón. En los 90 hubo atascos, luego hubo menos... Estamos en un nuevo momento de movilidad. Es una consecuencia de que las cosas han ido bien. La sociedad ya se autogestiona, ahí está BlaBlaCar, no puede ser que queramos obligar a nadie», consideró, al tiempo que ha lamentado los incumplimientos históricos y reproches cruzados entre los grandes partidos.
Lillo sacó a relucir la idea del BRT y carriles reversibles como soluciones baratas, rápidas y paliativas.
Miró insistió en la ciudad conjunta. «Es ridículo pensar que desde Rincón haya que ir al Muelle Heredia para ir a Teatinos. Un bus VAO sería comprensible por el Este. El Plan Intermodal de 2000 ya dibujaba cosas como los aparcamientos disuasorios», ha explicado. Y se ha mostrado optimista con el tren litoral. En este punto, ha apostado por flexibilizar el Cercanías, de modo que todos los trayectos no sean de principio a fin (Málaga-Fuengirola).
«Las grandes infraestructuras necesitan dinero del Estado y no nos llega porque va a Cataluña. Pero antes tenemos que ponernos de acuerdo en cuestiones como intermodalidad, integración tarifaria, etc.», apostilló Berlanga.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.