La capital malagueña y la Costa del Sol son uno de los escasos territorios peninsulares que está escapando a una ola de calor que pinta de rojos y naranjas la mayor parte del mapa meteorológico español. No así el interior de la provincia, donde Aemet mantiene avisos desde ayer hasta el viernes, por máximas que este jueves pueden alcanzar los 44 grados, especialmente en Antequera y en menor medida, en la Serranía de Ronda.
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En realidad, el litoral sólo va a notar el nuevo episodio de calor elevado mañana, viernes, noche de los Fuegos que dan comienzo a la Feria de Málaga. Lo va a hacer de una manera breve pero con una elevada intensidad, siempre que se cumplan las predicciones de los modelos meteorológicos. Un episodio efímero de terral hará subir el mercurio hasta los 40 grados en la capital, e incluso por encima en el Valle del Guadalhorce. Pero lo hará solamente durante unas pocas horas.
Lo más destacado será en realidad lo que ocurra con las mínimas, pues es probable que el poniente cálido surja a primeras horas de la madrugada, lo que hará que los termómetros marquen de 30 a 32 grados en algunos puntos de la provincia durante la noche del jueves al viernes, según explica José Luis Escudero, el experto en al meteorología provincial y responsable del blog Tormentas y Rayos. Será lo que Aemet ya ha dado en llamar una «noche infernal», en la que costará mucho conciliar el sueño sin la ayuda del aire acondicionado.
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«El modelo Europeo dice que el terral se irá hacia el mediodía, una vez que el levante comience a entrar por la costa oriental, y bajará mucho las temperaturas, de hecho a esa hora se dará la máxima del día» (entre 39 y 41 grados, especialmente en el Valle del Guadalhorce). «Menos mal, porque si siguiera hasta última hora de la tarde, el viernes llegaríamos con seguridad hasta los 44 en Málaga». Cuando entre el viento del este también se producirá una inversión, y el termómetro volverá a repuntar en Antequera.
A partir de la tarde del viernes y al menos durante la primera mitad de la feria el régimen de viento previsto será el de levante, lo que se traducirá en temperaturas máximas bastante llevaderas, de 30-31 grados, aunque con una humedad relativa muy elevada, que hará que se sude más. Las mínimas nocturnas estarán en la tónica general de este verano, en torno a 23-24 grados, ideales para salir de fiesta en el real.
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Diferente será el escenario lo que resta de semana en el interior de la provincia. Según el aviso especial emitido por Aemet, desde el lunes un flujo de componente sur en niveles bajos de la atmósfera está favoreciendo la entrada de una masa de aire continental africana, muy cálida y seca y con polvo en suspensión (calima). «Los ascensos térmicos se están debiendo, además de a la alta insolación propia de esta época del año, a esta entrada de aire africano».
En el interior de la provincia, lo peor se espera hoy. Desde el principio de la semana, la comarca de Antequera está en aviso naranja y soporta temperaturas de 40 grados, pero este jueves, aún sin cambiar de nivel de advertencia, los termómetros marcarán un promedio de 43 y superarán en algunos puntos los 44 grados. El aviso se prolongará hasta el viernes.
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