Elías Bendodo culpa al Gobierno de «bloquear» el avance de las infraestructuras en Málaga

Bendodo estuvo este viernes en Málaga y compareció desde la sala de prensa que tiene el PP en su sede provincial. Lo hizo acompañado por el coordinador general de los populares malagueños, Cristóbal Ortega, que más tarde tomaría la palabra para defender el reciente anuncio de la Diputación de condicionar el 30% de los fondos que llegan a los ayuntamientos a inversiones dedicadas a combatir la sequía.

Pero la Diputación, en esta ocasión, era un tema secundario. Bendodo acudió para repetir ese mensaje en el que insiste el PP de manera machacona y que dibuja al ministro Puente como un freno de mano para los intereses de la provincia. «Estamos acostumbrados a que sea el ministro de los bloqueos en las redes sociales, pero también bloquea los proyectos para Málaga», dijo. Cerrar las puertas al tren de la Costa del Sol, consideró Bendodo, es un «insulto» a los malagueños y una manera acelerada de escribir su epitafio político en la provincia.

El líder popular no esconde que trazar la infraestructura ferroviaria hasta Marbella es un reto de enorme envergadura. Pero negó que no fuera realizable. «Es complicado, claro, pero es muy viable. La ingeniería ha avanzado mucho. Lo que falta es voluntad política», añadió. El PP no se mueve de esta postura ni en su estrategia a futuro se percibe que el tren a la Costa del Sol salga de las reivindicaciones. Al revés. Bendodo anunció que los populares pedirán el tren hasta Marbella en el Parlamento andaluz. Un movimiento que obligará al PSOE-A a retratarse de alguna manera.

Cuando se le preguntó a Bendodo por si había más consenso con el Gobierno en infraestructuras relacionadas con el agua, dio a entender que no. «No habrá Presupuestos Generales porque en Cataluña se han convocado elecciones. Eso significa también que habrá cero euros para infraestructuras hídricas en la provincia de Málaga», dijo.

Bendodo acusó a Sánchez de «mentir» y propagar «cortinas de humo» para desviar la atención de una acción de gobierno que «pierde el 50% del tiempo en contentar a los partidos independentistas». Mientras que la oferta para la provincia de Málaga sería nula, en Cataluña existiría, según Bendodo, banda ancha para invertir en la mejora de infraestructuras.

Hay algo que pasa con Bendodo cuando comparece en Málaga desde que dio a la política nacional. Aunque él intente canalizar sus críticas al Gobierno poniendo el enfoque en la provincia, sus comparecencias se convierten en un batiburrillo de mensajes y preguntas. Así, se le cuestionó por su postura sobre un hipotético reconocimiento de Palestina como Estado. A nadie le puede sorprender que se posicionara más cerca de la «postura de José María Aznar» que de la Sánchez. El expresidente del Gobierno del PP se había mostrado contrario a ese reconocimiento y había defendido la política de Israel en relación al actual conflicto.

En el juego de confusiones que a veces es también la política, cayeron los nombres de Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, y el de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid. Y con ellos también la demostración de que ambas serán un elemento más de confrontación. La primera utilizada por el PP para desgastar al Gobierno y la segunda por el PSOE para contrarrestar y hacerse con eso que se llama «relato».