La Consejería de Educación y Deporte está preparando el nuevo proyecto de decreto que ordena y modifica el currículo del Bachillerato en Andalucía para el próximo curso escolar. Y los cambios que se proponen están despertando el malestar entre algunos colectivos de profesores. Entre las modificaciones más destacadas se encuentra la que afectará a la asignatura de Francés, que en el primer borrador elaborado por los responsables de Educación deja de ser materia obligatoria en primer curso de Bachillerato. Un «retroceso», indican desde la asociación de profesores. Otra de las asignaturas que se verán afectadas por los cambios es la alternativa a Religión, que será Cultura Científica en vez de Ciudadanía.
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El proyecto de decreto que prepara la Consejería ha sido presentado a los sindicatos y está en fase de exposición pública. Será aprobado en los próximos meses, para que pueda entrar en vigor el próximo curso. En concreto, en primero de Bachillerato, y para los alumnos de todas las modalidades, las materias del bloque de asignaturas específicas, que eran Educación Física y segunda Lengua Extranjera I, queda solo la primera, mientras que la segunda Lengua Extranjera pasa a ser optativa, y se tendrá que elegir de entre un listado de ocho (una materia entre Análisis Musical I, Anatomía Aplicada, Dibujo Artístico I, Lenguaje y Práctica Musical, segunda Lengua Extranjera I, Tecnología Industrial I, Tecnologías de la Información y la Comunicación y Volumen).
Cultura Científica sustituye a Ciudadanía como la alternativa de Religión. En segundo curso se mantiene Ciudadanía, como alternativa a la Religión. Y la segunda Lengua Extranjera II sigue como hasta ahora, optativa a elegir entre 11 asignaturas específicas.
Para el presidente de la Asociación de Profesores de Francés, Francisco Díaz, este proyecto «supone un paso atrás a años de trabajo y de logros conseguidos, en particular, en relación con el aprendizaje de lenguas extranjeras», y recuerda que el multilingüismo «forma parte de los principios rectores de la UE que marca que toda persona deba ser capaz de hablar dos lenguas extranjeras además de su lengua materna».
Reconoce los esfuerzos realizados para implantar un segundo idioma desde Educación Primaria, una evolución que queda cortada de manera drástica desde el momento en que deja de ser obligatoria en Bachillerato. Una medida que se toma ahora y que cree «incidirá en aumentar la brecha que separa la formación de los estudiantes andaluces en relación a sus homólogos europeos y los aleja de la igualdad de oportunidades en la movilidad académica y en el acceso a un puesto de trabajo».
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El estudio del francés está dando buenos resultados. El 47,7% de alumnos españoles que aprenden francés son andaluces. Andalucía es la segunda comunidad en número de candidatos que se presentan a las pruebas de certificación DELF con unos resultados de aprobados superiores al 90 por ciento. 23 de los 76 centros con la distinción LabelFrancÉducation, sello que se concede a los institutos y centros de enseñanza escolares extranjeros que participan en la difusión de la lengua y la cultura francesas, son centros educativos andaluces.
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