Secciones
Servicios
Destacamos
Entre los cien españoles más ricos hay apenas cuatro instalados en Andalucía y todos ellos son hombres. Se trata de Tomás Olivo, propietario de General de Galerías Comerciales; Manuel Domínguez de la Maza, primer ejecutivo de Mayoral; Eduardo Francisco Martínez Cosentino y su familia, propietarios ... del grupo Cosentino; y Santiago Domecq Bohórquez, prominente empresario agrario. Pero si se amplía el foco y se va más allá de la lista Forbes y se analiza el número de grandes patrimonios lo que, a falta de mejor y más objetiva estadística, se puede hacer a través de las declaraciones del Impuesto del Patrimonio, la fotografía difiere un poco de la que toma Forbes.
Para empezar, en Andalucía hay más mujeres ricas que hombres ricos. De esta manera, la declaración del patrimonio del año 2021 la presentaron 10.010 mujeres, frente a los 9.824 hombres que hicieron lo mismo. Terminaron pagando el tributo 9.057 altos patrimonios femeninos y 8.707 fortunas masculinas. Pero bajo este primer titular subyacen otras realidades menos favorables para las mujeres. Ello porque las 10.010 que presentaron la declaración de su patrimonio informaron de bienes por valor de poco más de 25.000 millones de euros, frente a los 31.467 millones de euros que declararon los 9.824 contribuyentes varones por este tributo. Esto significa que si los grandes patrimonios de Andalucía cuentan con bienes por valor de 56.505 millones de euros, en manos de las mujeres está el 44% de esa cantidad y en manos de los hombres, el 56%.
Ello supone que, de media, cada mujer declarante por patrimonio cuenta con una fortuna de algo más de 2,5 millones de euros, frente a los 3,2 millones que atesora, de media, cada hombre. La andaluza rica promedio cuenta con un patrimonio que es un 22% inferior al del andaluz rico medio.
Por ello, la factura que pagaron hombres y mujeres a Hacienda por su patrimonio en el último ejercicio también difiere. Mientras las mujeres abonaron el tributo por un total de 45 millones de euros en Andalucía –como consecuencia de todas las deducciones y exenciones que rebaja la base imponible sobre la que pesa la figura fiscal–, los hombres hicieron lo propio por un total de 62,58 millones de euros; y el ticket medio en ellas fue de menos de 5.000 euros, mientras que en el caso de ellos ascendió a los 7.188 euros.
El Impuesto sobre el Patrimonio se extingue. A nivel nacional se verá suplido por el nuevo impuesto que grava la riqueza, sobre todo tras el aval recibido del Constitucional. Pero, a efectos estadísticos, aún informa de cómo es la fotografía de la riqueza en España. Aunque hay que tener en cuenta que sólo contempla a los obligados a presentar la declaración, que son los patrimonios por encima de los 700.000 euros, excluidos los primeros 300.000 euros de la vivienda habitual.
Hombres y mujeres también se diferencian en cómo tienen repartido su patrimonio. En síntesis, ellas cuentan con más bienes inmuebles y, a cambio, invierten menos en capital mobiliario –es decir, en acciones, bonos o fondos de inversión–.
Más en detalle, casi el 24% del patrimonio de las andaluzas más acaudaladas se encuentra invertido en bienes inmuebles, sobre todo de naturaleza urbana. En el caso de los hombres, sólo el 18% de su capital está depositado en «ladrillo». Así que si ellas tienen invertido casi uno de cada cuatro euros en pisos –sobre todo–, ellos ni siquiera destinan a este fin uno de cada cinco de sus euros.
Mientras tanto, el patrimonio de las mujeres está casi en un 66% en activos financieros, frente al casi 74% de los hombres. Los varones, por tanto, tienen más proporción de su fortuna invertida en renta fija, renta variable y fondos de inversión que ellas. Si el patrimonio medio invertido por los ricos en capital mobiliario es de 2,4 millones de euros, en el caso de las ricas la cifra cae hasta los 1,678 millones.
Por el contrario, las mujeres apuestan más por los seguros y las rentas vitalicias: ellas tienen invertido el 3% de su riqueza en estos productos, mientras que los hombres no llegan al 2%.
También hay una más que sensible diferencia en lo que a los bienes suntuarios se refiere. Así, los grandes patrimonios masculinos tienen algo más de 59 millones de euros invertidos en vehículos, joyas, pieles, objetos de arte y antigüedades; y la cifra en el caso de las mujeres es menos de la mitad, al limitarse a los 25,7 millones de euros.
Ésa es la foto fija más reciente que ofrece el Ministerio de Hacienda y Función Pública a través de la estadística sobre el Impuesto del Patrimonio. Pero también se puede hacer con esos datos un plano secuencia que muestre cómo han evolucionado los patrimonios masculinos y femeninos, por ejemplo, en la última década. Diez años antes, en 2012, las fortunas femeninas (9.398) también eran más en número que las masculinas (9.164). Además, la cifra de ricas en estos últimos diez años ha crecido un 6,5%, frente al ascenso del 7,2% del volumen de ricos.
Pero, de nuevo, es en el volumen del patrimonio en el que los hombres vuelven a ganar la partida a las mujeres: su fortuna total se ha incrementado un 40% desde el año 2012, frente al aumento del 32% registrado por la fortuna total que atesoran las mujeres que declaran por patrimonio. En cuanto a la riqueza media por declarante, mientras la de las mujeres ha subido un 23% desde los 2 hasta los 2,5 millones, la de los varones se ha incrementado un 30% desde los 2,46 a los 3,2 millones de euros per cápita.
Lo que sucede en Andalucía no es nada muy distinto a lo que pasa en el conjunto del país. Así, el número de mujeres que declaró su patrimonio en España en el último ejercicio ascendió a las 115.799, frente a los 115.568 hombres. Al final, la declaración les salió a pagar a cerca de 101.800 mujeres, mientras que los hombres no llegaron a los 100.000. Pero si los varones atesoran cerca de 491.000 millones de euros, el patrimonio conjunto de las millonarias es de 356.365 millones. Esto significa que de los 847.202 millones de euros que acumulan los ricos que hacen la declaración por patrimonio, casi el 58% está en manos de hombres, frente al 42% del que son titulares mujeres. Estas cifras muestran que la desigualdad patrimonial de género es algo superior en el conjunto de España que en concreto en Andalucía donde el reparto era del 56% frente al 44% entre hombres y mujeres, por ese orden.
Si el rico medio en España tiene un patrimonio de 4,25 millones, la rica cuenta, como promedio, con algo más de 3 millones. Esto también muestra que los andaluces más adinerados, tanto los hombres como las mujeres, atesoran menos patrimonio que la media española –recordemos: ellos tienen un patrimonio promedio de 3,2 millones y ellas, de algo más de 2,5 millones–.
Ellas, en el conjunto de España, también apuestan en mayor medida por los inmuebles (el 22,5% de su patrimonio está en 'ladrillo', frente a apenas el 16,5% de la fortuna masculina).
Mientras, si la riqueza de los hombres está depositada en más de un 78% en acciones, bonos y fondos, los activos financieros sólo representan el 70% del patrimonio de las grandes fortunas femeninas del país.
Los estudiosos de estas cuestiones atribuyen estas diferencias a la disímil socialización de hombres y mujeres, a la distinta atribución de roles que se hace a unas y a otros, que hace que ellas asuman menos riesgos y ellos, más.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.