Los 13 alcaldes más jóvenes de la provincia de Málaga

Todos tienen el denominador común de gobernar en pequeños municipios y la mayoría se enfrenta al problema que supone el riesgo de la despoblación. Le imprimen sus ideas con una visión actualizada y todos concluyen que las categorías políticas de izquierdas y derechas carecen de peso cuando los vecinos no dudan en tocar por la noche en tu puerta si requieren de ayuda. A continuación, los 13 alcaldes más jóvenes de la provincia, en un rango de edad que va desde los 27 hasta los 35 años.

Es el alcalde más joven de los 103 municipio de la provincia. Su carrera política empezó durante el anterior mandato. Estuvo al frente de la concejalía de Cultura. Después de terminar la carrera de Derecho en Málaga, le ofrecieron el cargo y aceptó. «El alcalde es la persona principal a la que recurren los vecinos del pueblo cuando tienen un problema», explica y asegura que por ello se considera a sí mismo «un servicio público andante». Pero no es algo que le moleste. Al revés. «El cariño que recibes de los vecinos compensa por todo», señala. Aunque gobierne con mayoría absoluta, este joven huye de la política como algo dogmático: «A mí me gusta escuchar todo tipo de ideas», describe, además, que su relación con la oposición (PP e IU) es muy buena».

«Siempre me ha gustado la política». Ese fue el motivo que llevó a Alberto Benítez a presentarse a la alcaldía de Jubrique. Ya había trabajado en el Ayuntamiento, pero asegura que «lo de ahora no tiene nada que ver». Lo de ahora es el bastón de mando de alcalde y una jornada laboral sin horarios. Benítez encabeza el grupo municipal del PSOE con cinco concejales. Quiere centrarse este mandato en luchar contra la despoblación de su municipio: «Queremos que los jóvenes se asienten en Jubrique». Cree que para ello ha sido bueno el relevo generacional que se ha producido en el PSOE en su municipio. «La media de edad de mi grupo municipal es de 30 años», expone que, en Jubrique, la juventud sí es un valor que cotiza en política.

Tiene experiencia en el Ayuntamiento de Fuente de Piedra. Durante el anterior mandato, ya fue el teniente de alcalde. En mayo, dio el salto a la alcaldía. Pachón es graduado en Educación Primaria, aunque reconoce que siempre he sentido el latido de la vocación por el servicio público. «Yo ya dije en campaña que iba a ser alcalde 24 horas», asegura que los vecinos se han tomado en serio su promesa. A pesar de unas jornadas laborales eternas, «siento una enorme gratitud cuando veo que el poder de decisión se traduce en mejoras para mis vecinos». Pachón cree que la política no está bien vista entre algunas jóvenes. Pero no la política en sí, sino una forma de hacer política basada en la bronca y disputa continua. Es más, asegura que «la sociedad nos está demandando a los jóvenes que nos pongamos al frente de la política».

Este alcalde del PSOE gobierna en Moclinejo gracias a un pacto a tres con IU y Por Mi Pueblo. Ingeniero industrial, admite que en estos primeros meses en política está aprendiendo cómo gestionar un ayuntamiento y lidiar con la burocracia. «Tenía inquietudes y me propusieron liderar la lista del PSOE, y no me lo pensé», recuerda el momento de dar el paso al frente. En su caso, no llegó a militar en las Juventudes Socialistas, pero sí le gustaría implantarlas en Moclinejo. Su principal reto lo sitúa en la lucha contra la despoblación. «Queremos potenciar el turismo rural», adelanta, al mismo tiempo que reconoce que sus jornadas laborales como alcalde no conocen un horario fijo. «Es normal, es un pequeño pueblo y todos nos conocemos», detalla que no es algo que le moleste. Al revés.

Cristóbal Corral admite que el contexto social y político de su municipio natal le ha marcado. La economía de Teba se basa en la agricultura y pronto se familiarizó con los discursos reivindicativos de los sindicalistas en el campo de fútbol del municipio. «Yo empecé a militar en el PCA a los 18 años. Evidentemente, mi motivación política me viene de ver como la gente del campo luchaba por mejorar sus condiciones de vida», explica. Corral estudió Ciencias Políticas y Derecho en Granada. Allí se convirtió en uno de los principales portavoces del 15-M. «Podemos decir que soy un heredero del 15-M, pero yo ya estaba politizado», matiza. El actual, es su segundo mandato y en las elecciones de mayo logró mejorar los resultados de 2015. Un 70% del voto para una de las mayorías absolutas más holgadas de la provincia. «Soy muy intenso y le dedico muchas horas a mi trabajo. En los últimos años, apenas me he cogido un día o dos de vacaciones. Seguramente, como la mayoría de mis compañeros», señala la condición de alcalde en un pequeño municipio está marcada por la cercanía que hay con sus vecinos.

«Desde pequeño, siempre he querido ser alcalde de mi pueblo». Directo y sin rodeos. Así se muestra Juan Alberto Naranjo. Estudio Ciencias Políticas en Granada y ahora es alcalde de Ardales de IU, después de lograr arrebatarle el bastón de mando al PSOE. Quedan heridas abiertas y reconoce que con el PSOE la relación está «fatal». «No han aceptado que hayan perdido las elecciones con tanta claridad». En su caso, las jornadas laborales también se han prolongado. «Los vecinos incluso tocan en mi puerta por las noches», asegura. Quiere que los jóvenes del municipio tengan trabajo para que no tengan que marchar: «Hay que volver a recuperar la alegría de Ardales». Para ello confía en que la economía local se beneficie de esa «gallina de oro» que es el Caminito del Rey. «Nos hemos quedado algo descolgados», admite al respecto.

Vocación por la política desde que tiene uso de razón. Concejal en Alfarnatejo desde los 18 años. Aunque solo lleva como alcalde desde junio, asegura que «es la mejor experiencia que he tenido a nivel profesional». En su caso, no es la primera porque viene de trabajar cinco años en el BBVA. Licenciado en Derecho, también ha trabajado en tiendas de ropa para mejorar la economía personal durante su etapa de estudiante. Avisa que ser alcalde en un pequeño municipio es algo que «te tiene que gustar mucho». «Conlleva un esfuerzo inmenso todos los días», precisa que, también en Alfarnatejo, «la despoblación es uno de los grandes problemas». «Si no quieres trabajar en la agricultura o en la ganadería, te vas fuera del pueblo». A Benítez le gustaría fomentar el turismo rural y se va a esforzar para conseguir inversión que vaya dirigida a este segmento.

Este es el segundo mandato de Ana María García. «La primera legislatura estuve de teniente de alcalde», recuerda y señala que ahora está cogobernando con Más Pueblo. Manifiesta que lo suyo es pura vocación. Todo lo que haces, te parece poco», señala que considera que se siente muy realizada como alcaldesa. García está afiliada en IU desde los 18 años y siempre tuvo claro cuál era su orientación política. «La despoblación es un reto para todos los alcaldes de los pequeños municipios», advierte y expresa su deseo de «terminar el polígono industrial en este mandato». La construcción de un tanatorio y la reconstrucción del antiguo molino de aceite también son otras de las principales reivindicaciones de los vecinos de Cuevas del Becerro.

José María García ha pasado de la bancada de la oposición, en la que era portavoz del grupo municipal del PSOE, a ser ahora alcalde. De adolescente sintió la vocación por la política y ha sido uno de los referentes entre los jóvenes del PSOE de Málaga. Durante algunos años ha trabajado como técnico en el departamento de inmuebles de una gran cadena de supermercados alemanes. Destaca «la preparación y las ganas de trabajar por la igualdad de todos nuestros vecinos» y asegura rechazar el «oportunismo político». Sobre Casabermeja, asegura que es un «pueblo lleno de sorpresas, con muchos siglos de historia y una enorme riqueza patrimonial y cultural».

Licenciado en Derecho y abogado en ejercicio, compagina su profesión con la de alcalde de Arenas. En el anterior mandato, comprobó que la política no entiende de amigos. Le plantearon una moción de censura y prosperó. Pero las urnas le han devuelta el bastón de mando. A pesar de todo, asegura que se lleva bien con la oposición. «La discordia no tiene sentido en un municipio tan pequeño». Siempre ha estado en el PP, aunque reconoce que la afiliación le viene porque un grupo de amigos le convencieron. «Era más por vocación público, aunque, lógicamente, me gustan muchos aspectos del partido«, asegura.

Es su segundo mandato como alcalde, aunque este profesor de Secundaria, licenciado en Historia, es concejal en el Ayuntamiento de Sierra de Yeguas desde 2009. En mayo, logró revalidar la alcaldía. «Ahora mismo gobierno en coalición con un grupo independiente de Sierra de Yeguas, que es Alternativa Local», explica quien se afilió al PSOE al 2006. «La política tiene que ser vocacional. Es una inquietud que se manifiesta cuando anteriormente participas en la vida del municipio a través de las asociaciones locales. El principal reto para Sierra de Yeguas es luchar contra la despoblación», expone. Además, asegura, que en este mandato se va a dotar a su municipio de unas infraestructuras de las que carece por ahora. Entre ellas, la construcción de un centro de día. «Nunca te vas a poder desvincular del cargo que ocupas. Siempre hay una consulta por móvil porque tu número lo acaba teniendo todo el mundo», resume que el trabajo de un alcalde en un pequeño municipio es las 24 horas al día.

Juan González es alcalde de Villanueva del Rosario desde el verano de 2018, cuando ocupó el cargo tras la marcha de su antecesor, José Antonio González. Está afiliado en el PSOE desde los 20 años. «Recuerdo que José Antonio nos propuso ir en su candidatura y acepté», explica. Ser alcalde, en un principio, no era algo que pasaba por su cabeza. Ahora reconoce que le provoca mucho orgullo. «Es nuestra tercera mayoría absoluta consecutiva», añade. Entre sus principales retos está la lucha contra la despoblación. «Villanueva del Rosario está cerca de cuatro grandes ciudades y tenemos que saber darle oportunidades para que nuestros jóvenes se queden aquí», resume.

Cierra esta lista de los trece alcaldes más jóvenes de la provincia Manolo Sillero. También es el único independiente, aunque se presentó encabezando la candidatura del PSOE. «Siempre he participado en lo público y me ha gustado ayudar en mi municipio. Pensaba que había cosas que se podían mejorar», relata sus motivaciones para dar el paso. El inicio del mandato no ha sido fácil, ya que el Ayuntamiento carecía de un secretario. «Han sido meses complicados porque, hasta hace tres semanas, no hemos tenido secretario en el municipio. Todos los trámites han sido más lentos», recuerda. En estos momentos, el alcalde ya trabaja, prácticamente, 24 horas para remontar el tiempo perdido.