Condenan a cinco años de prisión a un malagueño por una protesta en el Congreso

La Sección número 15 de la Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a uno de los participantes de la primera manifestación convocada con el lema Rodea el Congreso, en 2013, a una pena de cinco años de prisión y al pago de una multa de 240 euros. Se trata de Francisco Molero, un militante del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) de Cuevas de San Marcos (Málaga) al que se le considera responsable de haber atacado a varios policías nacionales durante la protesta.

Los hechos tuvieron lugar el 25 de abril de 2013 en Madrid. En la sentencia, a la que ha tenido acceso este periódico, se explica que Molero participó en la concentración ante el Congreso de los Diputados. Los problemas comenzaron cuando miembros del dispositivo de seguridad, formado por agentes de la Policía Nacional pertenecientes al cuerpo de antidisturbios, ordenaron a los manifestantes que se desplazaran.

Fue entonces cuando Molero comenzó a recoger piedras y losas de la calle, que rompía contra el suelo, lazándolas a continuación contra los agentes, según la sentencia. En ella también se indica que este malagueño provocó diferentes lesiones a tres policías nacionales, como contusiones, una rotura fibrilar o una contusión muscular.

Como consecuencia de ello, ha sido condenado a una pena de tres años y un día de prisión por un delito de atentado con empleo de medio peligroso y a dos años de cárcel por dos delitos de lesiones. Asimismo, se le considera responsable de una falta de lesiones, por la que se le impone una multa de 240 euros.

También ha sido condenado a indemnizar a los agentes en las cuantías de 5.700 euros, 10.300 euros y 810 euros en función de las diversas lesiones y secuelas ocasionadas, siempre según se recoge en la resolución judicial, que ya es firme.

Mientras tanto, desde el SAT se han convocado diversas manifestaciones y concentraciones de apoyo a este joven malagueño de 27 años. A través de las redes sociales explican su versión de lo ocurrido e insisten en que Molero se vio arrollado por las cargas policiales que reventaron la manifestación, cuando uno de los agentes le tiró al suelo y le detuvo.

Asimismo, desde el sindicato critican lo que han denominado el «juicio-farsa» al que se sometió al militante. Aseguran que se le ha condenado sin más pruebas que el testimonio de los agentes, que le acusan sin fundamento, y que estuvieron contradiciéndose sobre el tiempo y lugar de los hechos, así como cambiando su versión en repetidas ocasiones.