Ignacio Lillo
Domingo, 13 de septiembre 2015, 00:41
Las avispas están en guerra (civil) en los castañares de la Serranía de Ronda. La globalización ha obligado a emprender una auténtica batalla biológica en parajes como El Juanar y en fincas particulares de Ojén, Monda, Coín, Istán y Tolox, donde la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio ha soltado de forma controlada al Torymus sinensis, un insecto similar a la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus) sobre el que actúa como parásito. El objetivo final es minimizar la plaga que está acabando con estos árboles emblemáticos de la provincia y sus preciados frutos.
Publicidad
Este método de lucha biológica, que se está realizando por primera vez en España, se considera el más efectivo para combatir y reducir los daños que produce este insecto en los castañares. Se trata de un estudio controlado en campo para ver la evolución de este organismo exótico en el medio natural. Estos trabajos, autorizados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, se realizan una vez iniciado el desarrollo de las yemas para adecuar los ciclos biológicos de ambas especies (parásito y plaga). Esta plaga tan agresiva y que puede hacer peligrar los castañares andaluces. Básicamente, lo que hace la avispa parásita es habitar las agallas creadas por su anfitrión (la avispilla) y se alimenta de las larvas de esta última.
El insecto se detectó la pasada primavera en el paraje de El Juanar, ubicado en el monte público Sierra Blanca de Ojén. Desde entonces, la Consejería de Medio Ambiente ha llevado a cabo una serie de actuaciones fitosanitarias para minimizar la presencia de este insecto y evitar su proliferación. La plaga de la avispilla afectó, en una superficie de cinco hectáreas, al 90% de los árboles (con daños en el 75% de la copa) de El Juanar. Cabe destacar que aunque este organismo no llega a producir la pérdida de árboles -aunque sí un fuerte debilitamiento vegetativo- este hecho puede suponer un importante perjuicio económico en las zonas productoras, ya que puede provocar caídas en la fructificación del castañar en un 90%.
Origen de la especie
La avispilla del castaño es un insecto de la familia de las avispas de las agallas (Cinípidos) que afecta exclusivamente a los castaños. Es originario de China y comenzó a propagarse en 1941 en Japón y en 1963 en Corea. En el continente americano fue detectado en 1974 en EEUU y en Europa en 2002, concretamente en Italia. Posteriormente, se ha ido detectando en diferentes estados europeos como Francia, Eslovenia, Suiza, Hungría, Croacia, Holanda, Eslovaquia, Alemania, Republica Checa. En 2012 finalmente se introdujo en España, concretamente en Cataluña, y desde el pasado año está presente también en Cantabria, Asturias y en los castañares de la provincia de Málaga. Todos los indicios apuntan a que la llegada del insecto está asociada al movimiento de material vegetal afectado procedente de viveros.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.