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Desde hace un par de meses, los vecinos de Jardín de Málaga, más concretamente de la calle Marqués de Mantua, viven una situación anómala que afecta de manera continua a su día a día. Unas 200 familias de la zona denuncian problemas con el suministro eléctrico, lo que ha provocado cortes de luz de más de cinco horas, dejándolos sin posibilidad de realizar sus actividades diarias con normalidad.
En algunos casos, la falta de electricidad no es el único problema que deben afrontar. En ciertos recintos, según ha podido saber este periódico, la avería ha afectado a los motores del aljibe, que centralizan el suministro de agua, lo que provoca que tampoco dispongan de este servicio durante las horas que dure la incidencia.
Estos cortes no se producen de manera aislada ni previsible. El problema es recurrente y ocurre en horarios aleatorios, aunque suele ser más frecuente en la tarde-noche o de madrugada. «Lo único que podemos hacer los vecinos es llamar a Endesa, que es la compañía encargada del suministro eléctrico en la zona, y esperar a que envíen un técnico», explica José Antonio Gaitán, uno de los afectados. Además, Gaitán relata que cuando sucede la avería, el técnico suele tardar unas tres o cuatro horas en llegar. También menciona que, según la compañía, no aparece ninguna alerta de problema en la zona. En algunos casos, el mismo técnico ha solucionado la incidencia, pero ha tenido que regresar pocas horas después por una nueva avería.
Desde Endesa, la empresa encargada del suministro eléctrico, han confirmado a SUR que están al tanto de la situación en Jardín de Málaga. Además, han informado que tienen previsto realizar un «descargo» la próxima semana, es decir, un corte programado para que los técnicos puedan trabajar en la red y luego reconectarla. Las intensas lluvias de los últimos días, junto con incidencias relacionadas con el agua y la baja tensión, han impedido que se lleve a cabo esta intervención esta semana, ya que no es recomendable realizarla en esas condiciones.
Esta situación afecta de manera recurrente la vida cotidiana del vecindario. Entre las consecuencias, los vecinos mencionan la pérdida de productos que se han echado a perder en la nevera, la caducidad de ciertos medicamentos y, en algunos casos, problemas de salud. «Nos consta que hay vecinos en los bloques colindantes que necesitan respiradores eléctricos. Estamos hablando de un problema que no es solo una incomodidad, sino también una cuestión de salud», advierten.
Por otro lado, los residentes alertan sobre un fuerte ruido que se produce cada vez que se inicia un corte en la caseta donde se ubica el transformador, justo al lado del CEIP Rafael Alberti, un colegio de educación primaria. «Me he detenido justo enfrente de la caseta, y creo que no exagero cuando digo que parece una explosión, es algo tremendo», manifiesta Gaitán.
Desde la barriada de Jardín de Málaga temen que las instalaciones no estén en buenas condiciones de mantenimiento y piden a Endesa, con carácter urgente, que realice trabajos de sustitución en el transformador o en alguno de sus elementos. Para ello, los vecinos, junto con el colegio Rafael Alberti y el instituto Jardín de Málaga, han enviado una reclamación formal a la empresa.
Por su parte, Endesa explica que el problema se debe a que uno de los fusibles se funde. Este tipo de fusibles no es como los domésticos, sino que tiene una gran envergadura y mayor dimensión. Actualmente, el fusible actúa como un mecanismo de protección contra sobrecargas, pero está provocando cortes al fundirse. Por ello, la compañía ha señalado que intervendrán para reemplazar la pieza defectuosa y sustituir el fusible.
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