Un vecino del Mayorazgo recurre al Defensor del Pueblo por la apertura de una calle

Desde que se abrió el vial, el 19 de septiembre, los residentes viven con miedo por «el permanente riesgo de accidente». Por ello, han hecho llegar sus quejas a los concejales del distrito Este, de Ordenación del Territorio y de Movilidad; y están pendientes de una cita con el alcalde, Francisco de la Torre. De momento, nadie en el equipo de gobierno ha atendido sus reivindicaciones. «Cuando haya un accidente reclamaremos al maestro armero», exclama.

Emilio Mena ha pedido en última instancia el amparo del Defensor del Pueblo Andaluz, que aceptó su queja y pidió al Consistorio que le informe formalmente sobre la decisión de conectar el vial. Asimismo, ha solicitado –y sufragado– un informe de una consultora independiente de movilidad, que también se ha presentado al Ayuntamiento, y donde los técnicos detectaron que la calle se abrió sin contar con un estudio previo de movilidad, siempre según su testimonio.

«Por lo menos nos tienen que dar una seguridad de que esto no va a ocasionar un accidente con los niños, que van a la piscina y a las zonas comunes por ese camino», reclama Mena. El informe propone varias alternativas técnicas de calmado del tráfico, como la de dejar la calle con un sentido único de subida, hacia el norte, con lo que la velocidad bajaría y la curva no sería tan peligrosa como lo es en la bajada. En otras urbanizaciones de la zona Este ya se ha hecho así.

Además, de forma provisional, solicita la creación de un Área 30 (con la velocidad limitada a 30 km/h); con dos badenes, a la entrada y a la salida, y señalización de refuerzo o radares. «La solución es fácil y barata», asegura.

A los juzgados

Mena no duda en advertir de que está dispuesto a ir a los tribunales para garantizar su seguridad y la de sus vecinos. «Como aquí haya un accidente, iremos a los juzgados contra quienes hayan tomado la decisión de abrir este vial a las bravas», asevera.

Preguntado al respecto, el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, explica que la conexión de Colinas del Limonar con la calle La Minilla se enmarca dentro del proyecto de urbanización, que «está aprobado con todos los trámites». «He atendido a los vecinos para explicarles que no hay ninguna irregularidad», afirma.

En todo caso, el edil expone que tendrá que ser el Área de Movilidad el que estudie la posibilidad de implantar en la calle medidas de calmado de tráfico, y sus responsables también se han reunido ya con los afectados.