Vals Sport, Kaiju y Pádel Málaga se disputan el nuevo centro deportivo de Puerto de la Torre

Según el pliego de condiciones, el periodo de explotación será de 20 años a cambio de un canon mínimo de 20.822,11 euros anuales. Una cuantía que las tres ofertas en liza superan ampliamente. A falta de una valoración técnica, la mejor posicionada desde el punto de vista económico sería el grupo Kaiju. La sociedad que ya gestiona el Museo del Videojuego Oxo ubicado en la plaza del Siglo y la Fábrica del Videojuego en el polígono Alameda ha ofrecido un canon anual de 60.000 euros, que se vería incrementado en un 4,5% durante los primeros 15 ejercicios y una actualización anual durante los cinco restantes que darían un resultado de 171.540 euros en año 20.º y un pago total de 2.100.001 euros.

Explotaciones Deportivos de Alto Rendimiento Malagueño, la firma cuyo nombre comercial es Vals Sport con instalaciones en El Cónsul, Teatinos, Ciudad Jardín, Carretera de Cádiz (Ave María) y Churriana, pone sobre la mesa una partida inicial de 30.000 euros, ampliables en un 10% anual cada uno de los 20 ejercicios, acabando con una cuota de 183.477 euros y un abono total de 1.718.249,98 euros.

La tercera oferta es la de Pádel Málaga. La firma que ya gestiona un complejo de pistas en el polígono El Viso ha licitado con un canon inicial de 42.000 euros, que se vería aumentado en un 4,5% anual durante los primeros 15 ejercicios y en un 14% anual durante los cinco restantes de concesión, lo que arrojaría una cuota total de 1.500.000 euros.

El interés mostrado por estas tres empresas asegura la intención municipal de recuperar para los vecinos de Puerto de la Torre y Teatinos el complejo deportivo de Los Limoneros, cerrado a cal y canto desde marzo de 2021 por el mal estado que presentaba y que demolido en agosto del año pasado tras varios episodios de vandalismo e incluso de 'okupación'.

La decisión de cerrar el recinto fue tomada por Urbanismo a raíz de un informe emitido por el Área de Deportes en el que se advertían la existencia de numerosas anomalías en el mantenimiento y funcionamiento de las instalaciones, además de constatar que no se cumplían las mínimas condiciones necesarias para el uso público tanto desde el punto de vista funcional como sanitario.

De hecho, tanto la piscina cubierta como el gimnasio llevaban tiempo cerrados al público, por lo que en el momento de la orden de clausura únicamente estaban en funcionamiento el bar y las pistas de pádel, aunque con escaso mantenimiento. Como destacaban desde Urbanismo, el estado era de abandono.

Ante esta situación, el Ayuntamiento procedió a rescindir el contrato de concesión del complejo y a revertir al patrimonio municipal este espacio, en el que se prevé la instalación de este nuevo equipamiento que dé servicio no sólo a los vecinos de Puerto de la Torre, sino también de Teatinos.