Una de cada tres mujeres con cáncer de mama pierde su trabajo por la enfermedad

Con motivo de celebrarse hoy el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) pone de manifiesto que ese tumor hace más vulnerables a las mujeres que lo padecen. Así, en el estudio de la AECC 'Toxicidad financiera en el cáncer de mama', se alerta de que casi un 34 por ciento de las enfermas han perdido su trabajo o se han visto obligadas a dejarlo a causa de la enfermedad; el 70 por ciento se han quedado sin su salario o sin casi todos sus ingresos y cerca del 36 por ciento pierden 11 meses de actividad laboral.

El citado estudio revela que un diagnóstico de cáncer de mama genera de media, entre gastos directos y pérdida de ingresos, 41.834 euros durante el padecimiento. De ese modo, una enferma con un tumor en el pecho tiene unos gastos directos de 9.242 euros y una pérdida de ingresos de 32.578 euros. La AECC ha hecho un llamamiento social para corregir la inequidad que existe en torno al cáncer y, en concreto, en el de mama, del que se diagnosticaron 33.875 nuevos casos el pasado año en España y que provoca que el 15 por ciento de las enfermas estén «en situación de extrema vulnerabilidad económica y laboral».

Una vez que se ha conseguido incrementar la supervivencia, hay una serie de secuelas de tumor que hay que mejorar. Entre ellas, que la sanidad pública reduzca las demoras que afectan las pacientes parar recibir un masaje linfático cuando sufren un linfedema (acumulación de líquido linfático en los tejidos adiposos justamente debajo de su piel. Esta acumulación podría ser también considerada como una obstrucción que genera inflamación y malestar). El linfedema aparece con más frecuencia por la extirpación o el daño de los ganglios linfáticos como parte del tratamiento oncológico.

La presidenta de la Asociación de Mujeres Operadas de un Cáncer de Mama de Málaga (ASAMMA), Francisca Aguilar, dijo ayer a este periódico que el SAS tiene que ofrecer una respuesta más rápida a la atención de fisioterapia a las mujeres con linfedema. Ante esas demoras, ASAMMA dispone de una fisioterapeuta que da masaje linfático a las asociadas que lo necesitan. Otra cuestión que hay que impulsar es de la micropigmentación de las areolas de las pacientes que se han sometido a una mastectomía. El Hospital Materno puso en marcha una unidad para esa prestación, pero dejó de funcionar con la llegada de la pandemia, manifestó la presidenta de ASAMMA.

Francisca Aguilar, en cambio, destacó que se ha acabado con el retraso de hasta tres y cuatro años que había para las reconstrucciones mamarias de mujeres operadas de un tumor. Ahora, un decreto de la Junta de Andalucía garantiza que esa intervención se realizará en un plazo máximo de seis meses. Además, a algunas pacientes la reconstrucción se les hace el mismo día en que se le extirpa el seno afectado por el tumor. Asimismo, funciona bien el sistema que permite a mujeres jóvenes diagnosticadas de un carcinoma en la mama preservar sus óvulos antes de empezar con el tratamiento para, una vez superada la enfermedad, poder quedarse embarazadas.

El jefe de oncología médica de los hospitales Regional de Málaga (antiguo Carlos Haya) y Clínico y catedrático de oncología de la Universidad de Málaga, Emilio Alba, a preguntas de este periódico, señaló que hay que mejorar los procedimientos que se relacionan con la calidad de vida de las pacientes. «Hay que humanizar la asistencia una vez que hemos avanzado mucho en los tratamientos y en la curación», dijo el doctor Alba. A ese respecto, destacó que casi el 90 por ciento de las pacientes con un tumor de mama tratadas en Málaga consiguen superar la enfermedad. «Lo que nos preocupa es que entre marzo de 2020 y marzo de 2021 se diagnosticaron un 25 por ciento menos cánceres de mama que en el mismo periodo del año anterior, lo que supone que una de cada cuatro pacientes no ha sido diagnosticada a causa de la pandemia», precisó Alba.

Por otro lado, ayer lunes, como prolegómeno del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, el Teleférico de Benalmádena llevó sus cabinas teñidas de rosa, con el lazo distintivo que representa la lucha contra la enfermedad. El director de general de Teleférico de Benalmádena, Alberto Martín, entregó un cheque de 3.000 euros a la AECC de Málaga, dinero que será destinado a la investigación oncológica y a los programas y servicios de la Asociación contra el Cáncer.

Por su parte, El Corte Inglés iluminará de rosa hoy su edificio de Málaga en apoyo de la investigación del tumor de mama.