De la Torre entrega el escudo de la ciudad a Zorrilla por su cruce del estrecho solidario

No hay nada o casi nada mejor en política que el fair play, que viene siendo reconocerle a un compañero de bancada (aunque no de partido) sus buenas proposiciones o actos y eso es lo que vino a hacer precisamente ayer el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, con el portavoz de IU-Málaga para la Gente, Eduardo Zorrilla.

En un emotivo acto en el salón de los Espejos, el regidor reconocía la singladura a nado del Estrecho que realizó el edil de IU junto a otros tres compañeros el pasado día 3 de noviembre, un total de 17,3 kilómetros a nado en esta ocasión (porque depende de lo que se desvíen en la travesía), que culminaban a las 4 horas y 42 minutos. Tenía como objetivo una causa impulsada por la Fundación 20.000 brazadas solidarias, que ha ido a parar a la Fundación Miaoquehago, cuyo presidente, Bernardo Jordano, explicó que los 25.000 euros que se han recogido han servido para poner en marcha una terapia en piscina para que niños con dificultades desarrollen unas habilidades que no tienen «que consiguen así grandes avances, pequeños a los ojos de cualquiera, pero gigantescos para sus padres».

El escudo de la ciudad, un reconocimiento menor que la medalla, recayó en Zorrilla, sus compañeras Lina Lara y Navidad Moreno, enfermera y médica de urgencias del hospital Quirón, así como el arquitecto cordobés Gerardo Barrios y el entrenador de este equipo Guillermo Mediano (estos tres últimos excusaron su asistencia). También se reconocieron la labor de las fundaciones 20.000 brazadas solidarias y Miaoquehago, al alma máter del proyecto, Pedro Mora y a Carmen Oria, del equipo original. Algunos de ellos pertenecen, como Zorrilla, al club de nado malagueño Aliquindoi.

En el acto, De la Torre hizo un repaso de los lemas de la ciudad, la primera en el peligro de la libertad, muy hospitalaria, muy benéfica, muy noble, añadiendo que por qué no algún día tendría el titulo de muy solidaria haciendo alusión a muchas buenas obras, y entre ellas esta gesta que habían realizado el edil de IU y sus compañeros, que a su juicio creaba un círculo virtuoso. Así explicaba que el deporte lo realizan por solidaridad, y que a su vez les da salud, y todo eso les incentiva para ser más solidarios. Este juego de palabras gustó mucho a los presentes, así como que el primer edil les animara a repetir la experiencia o realizar otra travesía solidaria en otros mares.

Lina Lara, la enfermera de Quirón, le agradeció al alcalde el reconocimiento «que no esperábamos» y con el que decía sentir que la ciudad sentía el esfuerzo que habían puesto en el reto. En esta misma línea se expresaba Zorrilla expresándole su gratitud al regidor, al que le decía así como a los presentes:«Nos sentimos unos privilegiados por hacer algo que nos apasiona, que es nadar en el mar, que aún gana más si además puede servir para un fin solidario. Mi gratitud al Ayuntamiento y al alcalde; no hay nada más bonito para un malagueño que tener una medalla de la ciudad».

Atrás quedaron esos recuerdos de una jornada en el que nadaron entre calderones, delfines mulares y peces luna, que pusieron el punto bucólico; y en la que recibieron el aplauso de unos pescadores marroquíes cuando pasaron la punta de Cires y tocaron con sus manos el siguiente cabo. Ayer también quiso agradecer el edil de IU la comprensión que ha tenido a su familia, a la que tanto tiempo le ha robado para preparase en duros entrenamientos para la singladura. Los grandes retos son así: cuesta casi más prepararlos que ejecutarlos.