El terral sube el termómetro en Málaga pero el verano se resiste a llegar

El viento de poniente, que por momentos sopla en forma de terral, ha creado una especie de burbuja meteorológica en la capital malagueña y en la Costa, que no tiene nada que ver con lo que ocurre en el interior ni en el resto del país. El verano, tal y como se conoce por estas latitudes, se resiste a llegar por ahora, con temperaturas todavía suaves para esta época, e incluso persiste el riesgo de tormentas en el interior.

El régimen de viento se mantendrá al menos hasta el 13 de junio, lo que hará que siga refrescando en el interior pero evitará que baje tanto en el litoral, según explica el jefe de Predicción de Aemet, Fausto Polvorinos. Por poner un ejemplo, si ayer en Antequera la máxima estaba en el entorno de los 20 grados, en el Aeropuerto y el Puerto se alcanzaron los 28 y el fin de semana se llegó a los 30. Así, hasta el 14-15 de junio las temperaturas serán las normales en el litoral (26-28 grados), pero más bajas de lo habitual en Ronda y Antequera.

Hoy la máxima prevista será de nuevo de 28 grados, con una humedad relativa baja, por efecto del terral suave (en torno al 40%).

Como conclusión, apunta Polvorinos: «Mayo fue de otro siglo (por los bajos registros) y este junio, hasta el '40 de mayo' no te quites el sayo». A ello, se añade el hecho de que la sensación térmica es más baja allí donde sopla el viento, aun siendo de poniente. La media de las máximas históricas para la primera quincena de junio en Málaga es de 26 grados, justo la actual, aunque en lo que va de siglo XXI se han superado con creces estos valores en el arranque del verano.

En el interior es donde se nota claramente que el mercurio está más bajo de lo normal. En Ronda las diurnas están ahora en torno a 20-21 grados, y mañana, miércoles, será el día más gélido, y no llegarán a 20 (22-24 en Antequera). Además, la primavera tormentosa se seguirá dejando notar al menos hasta el fin de semana, por una sucesión de depresiones aisladas en niveles altos (danas), según el meteorólogo: «Esperamos una nueva que afectará sobre todo al norte de la península el miércoles, y otra baja que podría llegar al interior de la provincia el viernes».

De manera que, a criterio de este experto, la entrada del verano todavía no se ve, al menos hasta la segunda quincena de junio y, de hecho, la llegada definitiva del calor podría coincidir con el cambio de estación, que se producirá el día 21.

José Luis Escudero, autor del blog Tormentas y Rayos también coincide en que el miércoles y el viernes podría haber de nuevo riesgo de tormentas en puntos de Andalucía, especialmente en zonas montañosas que podrían salpicar a la provincia; y apunta: «Todo hace indicar que el famoso refrán se va a cumplir este año en muchos puntos de la Península. El modelo del Centro Europeo ha previsto claras anomalías negativas de temperaturas y positivas en cuanto a precipitaciones».