Azahara Muñoz

Hace una década que lleva el nombre de Málaga por todo el mundo, desde que irrumpió en el mundo del golf hasta afianzarse en la élite. Azahara Muñoz cierra otro año en el que vuelve a estar en primer plano, lo que le permite tener ... asegurada su presencia en los próximos Juegos de Tokio, la segunda cita olímpica a la que acudirá la sampedreña y reservada exclusivamente a los mejores. Eso será en 2020, cuando tiene depositadas muchas esperanzas para certificar las buenas sensaciones vividas en este año que concluye. Para Muñoz era una ilusión tremenda estar en la Solheim Cup (el certamen femenino de formato similar a la Ryder Cup) después del varapalo que sufrió al quedarse fuera de las doce seleccionadas en la edición celebrada hace dos años. Esta vez no sólo fue incluida en el equipo, sino que además logró su tercer triunfo frente al combinado americano. Sucedió en Escocia después de los éxitos alcanzados en 2011 y 2013, en Irlanda y Colorado, respectivamente. Esta victoria ha sido el broche a un gran 2019 que arrancó de forma sobresaliente, con la presencia entre las diez mejores en los primeros torneos celebrados. En su décimo año en el circuito americano (la LPGA), en marzo se quedó muy cerca de dar la campanada (concluyó segunda) y sólo en uno de los 20 torneos celebrados ante de la Solheim no pasó el corte. Recuperada de sus problemas de salud, Azahara Muñoz ha demostrado con creces su perseverancia, su innegable talento y su afán por pulir cualquier detalle para mejorar en su juego. Pero además a comienzos de diciembre deslumbró en los Premios Malagueños del Año de SUR por su simpatía, humildad y cercanía.