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Los vecinos de El Romeral y El Cónsul (Teatinos) empezaron a despedirse la semana pasada de las torretas de alta tensión una vez completado el soterramiento del tendido eléctrico que desde hace dos décadas venían reclamando. Unas demandas que también son históricas en otras barriadas ... de la capital como Granja Suárez, a la que ahora le llega el turno de eliminar las marañas de cableado de baja tensión, telefonía y alumbrado público que 'adornan' las calles y viviendas de esta zona situada entre la avenida de Valle-Inclán y la ronda oeste.
Pero más allá del impacto visual, los tendidos aéreos también generan problemas por las condiciones precarias en las que se encuentran algunos puntos, o por que los postes que sostienen el cableado (la mayoría todavía de madera) dificultan el paso de los viandantes por las estrechas aceras. Por tanto, la actuación que el Ayuntamiento está a punto de arrancar en Granja Suárez no sólo va a consistir en soterrar todas las redes de cableado que se encuentran actualmente en aéreo, sino que también se aprovechará para eliminar más barreras arquitectónicas y renovar el alumbrado por farolas con tecnología Led.
840.659
euros es el coste de la intervención impulsada por el Ayuntamiento, con un plazo de ejecución de nueve meses.
Los trabajos, que acaban de ser contratados a la empresa adjudicataria CFVC Construcciones por un importe de 840.659 euros y un plazo de ejecución de nueve meses con la previsión de que arranquen en unas semanas, suponen la continuación de una primera fase acometida en 2018 en las calles Triana y Sol por 199.228 euros. Ahora, el ámbito de actuación es más amplio al abarcar toda la trama comprendida entre la plaza formada por las calles Emilio Benavent y Victoria Kent, las calles Sierra de Almadén, Estrellas, el pasaje Dámaso Alonso, Galileo, Enrique Jardiel Poncela, Soria, Puerto del León, pasaje del Cartero y Padre Martín.
Al estar enclavada en un sector elevado de la ciudad, esta zona presenta numerosas cuestas y desniveles que se han visto agravados como consecuencia de un desarrollo «sin una planificación organizada dando lugar a pendientes pronunciadas y desniveles acusados entre las entradas a las viviendas y las rasantes de los viales», tal y como recoge el proyecto. Una situación que se pretende corregir soterrando el cableado aéreo existente y mejorando la accesibilidad peatonal de la zona con el aumento de la anchura de las aceras a un mínimo de un metro, la creación de vados peatonales donde sean necesarios, la modificación de escaleras y la creación de rampas. Asimismo, se habilitará un itinerario peatonal de 370 metros por las calles Emilio Benavent, Triana, Sol y Puerto del León para conectar puntos frecuentados por los vecinos como el colegio San José Obrero y la parroquia de los Remedios.
Con esta obra se cerrará un círculo cuyas primeras trazas se dieron en enero de 2009 con la redacción de un primer proyecto de pavimentación y eliminación de barreras urbanísticas en esta barriada. Aunque no fue hasta mayo de 2016 cuando el Ayuntamiento aprobó en pleno la puesta en marcha de un plan estratégico en Granja Suárez para soterrar el cableado eléctrico, eliminar los postes de luz y teléfono, asfaltado y acerado. Sin embargo, los vecinos tuvieron que esperar otros cinco años para que se desbloqueara esta intervención en 2021.
A partir de ahí, el paso definitivo se dio en mayo de 2022 con la salida a concurso de las obras por un presupuesto máximo de licitación de 955.294. La adjudicación tuvo lugar a mediados del pasado mes de abril y ha sido esta semana cuando se ha formalizado el contrato. De esta forma, el único paso que queda es la firma del acta de replanteo para que comiencen los trabajos sobre el terreno.
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