El sector alimentario se coloca en primera posición en inversión extranjera que llega a Málaga en 2020

Donde sí se ha producido un cambio de tendencia en 2020, el año a analizar, ha sido en los sectores que han liderado esta inversión. El de la alimentación se ha colocado en primer lugar, seguido del sector del automóvil y del de reformas y rehabilitación de viviendas. Así lo ha explicado esta mañana la directora gerente de la Fundación Ciedes, María del Carmen García, durante la presentación del mencionado informe, en un acto en el hotel AC Málaga Palacio, al que han acudido, entre otros, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, varios representantes consulares, empresarios y dirigentes sindicales

«Las empresas que más han crecido en atracción de inversión extranjera son el sector alimentario, las empresas vinculadas al automóvil y lo que es la rehabilitación de viviendas», ha manifestado García sobre la evolución de inversión en la provincia durante el 2020, año marcado de lleno por la pandemia.

En parte, así lo ha señalado, esta circunstancia explica que los sectores más importantes de la provincia, el turismo y el sector inmobiliario, no aparezcan entre los primeros puestos. Uno de los sectores en auge en Málaga, el de la innovación está, según Ciedes, en el cuarto lugar y con expectativas de seguir creciendo en los próximos años.

Este ranking se establece en función de una extrapolación que hace Ciedes de los datos que dispone a nivel andaluz, por lo que no se han podido ofrecer, pese a la consulta de los medios, cifras concretas para Málaga.

En la provincia la inversión extranjera bruta ha alcanzado en 2020 los 241 millones de euros. Pese a la pandemia, el capital extranjero que ha llegado de fuera supera ampliamente a la inversión de 2019, que fue de 148 millones. Un hecho que demuestra que la confianza en Málaga como destino para hacer negocios ha permanecería intacta y que las inversiones previstas antes de la irrupción del covid se han mantenido.

Estas cifras sitúan a Málaga en segunda posición a nivel andaluz en el ranking de atracción de inversión, solo por detrás de Córdoba, que ha experimentado un fuerte incremento. Si se pone el foco en la inversión acumulada, aquella que hace referencia a los última década, la provincia sí se mantiene en primer lugar, seguida de Sevilla.

A nivel nacional, la inversión que llega a la provincia representa el uno por ciento del total. «Aunque parezca poco para nosotros es mucho. Hay que matizar que aquí entran en juego todas las provincias españolas», ha puntualizado García durante su intervención.

De la Torre, que ha procedido a la directora de la Fundación Ciedes, ha asegurado que «Málaga se ha consolidando como una ciudad atractiva para la inversión de fuera» y ha destacado entre sus puntos fuertes que «dispone de una potente oferta cultural, un compromiso medioambiental muy claro y representa una ciudad completa en todos los sentidos». Por ello, ha abundado, empresas como Google, Vodafone o Dekra habrían apostado por la capital de la Costa del Sol.

El Barómetro del Clima de Negocios, el presentado hoy es la cuarta edición, también incluye una parte que hace referencia a las expectativas que tienen las empresas ubicadas en la provincia para el futuro y está basado en las respuestas de unas 300 compañías que han accedido a responder a una encuesta confeccionada por la Fundación Ciedes. Destaca que las empresas extranjeras miran al futuro con más optimismo que las nacionales, tanto en inversión a futuro como en la creación de empleos que se puedan generar en Málaga.

Las empresas extranjeras mantienen el 54,5 por ciento de las expectativas de inversión y exportaciones. En el caso de las nacionales, se reduce al 49 por ciento y baja todavía más respecto a las previsiones sobre la creación de empleo, que queda en un 37,5 por ciento. Aquí sí se hacen notar los efectos de la pandemia.

Este barómetro ha incluido por primera vez el teletrabajo como posible factor determinante en la encuesta realizada. Aunque las empresas extranjeras valoran esta opción y la añaden como factor positivo con respecto a la flexibilidad laboral, destacan en importancia al aeropuerto, con su amplia capacidad para conectar a Málaga con destinos nacionales e internacionales.

Por su parte, las empresas nacionales consideran en primer lugar la calidad de vida que ofrece la ciudad, seguida de las conexiones nacionales e internacionales, dejando en cuarto lugar la fácil integración de los foráneos.