Rocío Molina

Regina Sotorrío

Lunes, 30 de diciembre 2019

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Le faltaba el premio más completo y redondo a su trabajo y le llegó en 2019 con el Max al mejor espectáculo de danza. Rocío Molina sumó a su currículum la sexta manzana plateada de su trayectoria, reafirmándose así como una de las bailaoras españolas ... más sobresalientes de su generación. Lo hizo con 'Grito pelao', su montaje más desgarrador y sincero, una apertura en canal sobre el escenario para bailar sus ilusiones y sus miedos ante su embarazo en solitario. La malagueña no pudo recoger el galardón en persona por encontrarse de gira en Francia, recién incorporada a las tablas tras dar a la luz a la pequeña Juana. Hasta el estreno de su próxima creación, la malagueña recorre los teatros del mundo con 'Caída del cielo', obra que este 2019 le valió también el reconocimiento como mejor bailarina contemporánea en los National Dance Awards, un galardón que concede la crítica británica equivalente a los Laurence Olivier en teatro. Rompedora, valiente, atrevida, flamenca e incluso desconcertante, la 'danzaora' prepara lo nuevo en su refugio de Bollullos de la Mitación, donde ha transformado una antigua aceitera en su estudio, en su hogar y en una residencia para jóvenes artistas.