Un «revulsivo» para el sector de la carpintería y el mueble

Es una tendencia que continúa. Menos gastos en vacaciones y en salidas por las restricciones de movilidad; la incertidumbre por el futuro y la posibilidad de nuevos confinamientos; y más uso de los muebles del hogar han dado como resultado que los fabricantes no den abasto y las tiendas tengan que retrasar la entrega de los pedidos. «Llevo cerca de 20 años trabajando en el sector del mueble y nunca he vivido nada igual. En otras crisis económicas, somos de los primeros en resentirnos, porque la prioridad no es comprar muebles, sino llevar un plato de comida a la mesa. Sin embargo, desde que abrimos en la desescalada no hemos dejado de aumentar las ventas, sobre todo, de colchones, sofá, sillones reclinables y sillas de escritorio», aseguran desde una conocida tienda de muebles en Málaga. «Efectivamente se ha constatado un incremento en la demanda de reformas en las viviendas y en las ventas de muebles para el hogar. El cambio de hábitos que ha conllevado la pandemia, como el teletrabajo, estudiar a distancia y pasar más tiempo en casa ha puesto en valor el hogar y la versatilidad del mismo, y los consumidores están invirtiendo en los mismos, adecuándolos, ganando en confort y revalorizando sus hogares», declara Enrique Fernández, presidente de la Asociación de Clústeres y Empresas de la Madera y el Mueble de Andalucía (ACEMA).

Desde este colectivo, recalcan que ha sido un «revulsivo» para el sector de las reformas, carpintería y del mueble. «Ahora, están siendo beneficiarios de la inversión que antes destinábamos a sectores como el ocio y el turismo», precisa Fernández. En este sentido, explica que durante el estado de alarma, fueron muchos los fabricantes, comercios del mueble, profesionales y trabajadores que cesaron su actividad; y se vieron sumidos en Ertes, pero a día de hoy la inmensa mayoría de las fábricas han recuperado a todos los trabajadores que estaban en esta situación y están trabajando a buen ritmo. «En muchas empresas, la dificultad ha estado en encontrar personal formado y con experiencia», precisa.

A los pedidos que no se pudieron entregar durante los momentos más críticos de la pandemia se han sumado los de los clientes que llegaron con la reapertura, y aún se notan los efectos de la concentración de pedidos, aunque se aprecia ya una ligera disminución en los mismos. «Si bien el canal tradicional de la tienda ha venido experimentando un repunte, el del 'contract' (canal centrado en aportar soluciones de diseño y decoración en ámbitos como la arquitectura, el interiorismo, el equipamiento hotelero y otros espacios de uso colectivo) está sufriendo mucho los efectos de la crisis». No ocurre lo mismo en cuanto a las exportaciones, ya que los datos muestran que, tras meses de caída, se ha producido una recuperación en consonancia con el comportamiento del mercado nacional.

Desde el sector de la madera y el mueble en Andalucía hacen autocrítica y aseguran que, aunque cuentan con un amplio potencial exportador, deben apostar «por crecer, innovar, poner en valor la calidad de sus productos y, con el apoyo de la Administración, configurarse como uno de los sectores estratégicos, con impulso en creación de empleo», declaran.

Aún así, la cuestión que planea sobre el sector es cuánto durará el tirón de ventas y si los consumidores continuarán invirtiendo al mismo ritmo que en estos meses en sus viviendas una vez finalice la pandemia. «La duda principal ahora es si realmente se ha producido un cambio de tendencia y la adecuación/puesta en valor de nuestros hogares se ha situado entre nuestras prioridades de consumo», cuestiona Fernández. Los datos con los que cuenta el sector, entre los que destaca el descenso de visados de proyectos en los Colegios Oficiales de Arquitectos, provocan cierta incertidumbre en relación a un posible descenso de la demanda a partir del primer trimestre de 2021.

En el estudio 'Percepción de nuestro hogar tras el confinamiento', realizado por la empresa demoscópica Sigma Dos sobre la importancia del hogar durante y después del confinamiento y qué cambios de intereses se han producido en este periodo, se resalta como el 43,7% de los españoles valora más su casa tras estos meses. El salón ha sido claramente la estancia estrella para la mayoría de los españoles, un 52,6% así lo declara, seguido por el dormitorio (20,4%) y la terraza o balcón (7,9%). Sin embargo, los españoles con edades comprendidas entre 18 y 24 años declaran que su estancia favorita durante este periodo ha sido su dormitorio (50,8%).