Los reparos de Cultura frenan el proyecto para la Casa del Niño Jesús en Málaga

Ya han podido desarrollar algunos de sus proyectos de apartamentos, como el que ha abierto sus puertas en la calle Parras. En cambio, hay otros que aún permanecen frenados por diferentes cuestiones relacionadas con la tramitación urbanística previa a la que deben someterse. Es el caso de la residencia de estudiantes que han proyectado en el antiguo hospital de Santo Tomás, junto a la Catedral, paralizada por los reparos de la delegación de la Consejería de Cultura a la intervención planteada inicialmente –que está siendo modificada para salvar ese obstáculo–; y del proyecto para 27 apartamentos repartidos en dos edificios que enmarcarán una nueva calle para conectar Victoria con Lagunillas, frenado por cuestiones urbanísticas municipales.

En una situación parecida se encuentra una de las actuaciones más singulares de cuantas tiene previsto acometer White en los próximos años. Se trata de la reforma de la antigua Casa del Niño Jesús, en el número 21 de la calle Pozos Dulces, para habilitar un moderno hostel de 176 plazas. Estos promotores solicitaron la licencia de obras en junio de 2019 y todavía no han podido obtener la luz verde para acometer esta intervención, valorada en más de dos millones de euros y diseñada por los arquitectos Moisés Gómez Giner, Abraham Gómez Giner y Silvia Terrón Álvarez.

Por medio se ha cruzado una pandemia y dos informes en los que la delegación de Cultura no termina de aprobar la intervención planteada sobre el edificio. Pese a tratarse de una construcción con una protección arquitectónica de grado 2, el tercero de los niveles de catalogación establecidos por la normativa municipal, por debajo de la protección de grado 1 y la integral, los técnicos de Cultura no han aprobado hasta ahora muchas de las actuaciones previstas para este inmueble, cuya construcción puede datar de finales del siglo XIX o principios del XX. En la última documentación aportada a Cultura, los promotores han intentado hacer ver a los técnicos de la Junta que el edificio experimentó una profunda remodelación a mediados del pasado siglo. De hecho, en el catastro está datado en el año 1948 y han podido documentar con fotografías que entre 1946 y 1954 se hace una reforma integral del patio central, ya que en una de las imágenes se aprecia una «demolición completa de una amplia zona», según se recoge en los informes aportados por los privados a Cultura.

Ampliar

Pese a ello, hasta ahora, los técnicos autonómicos se han mostrado reticentes a dar el plácet total a la obra, y han pedido que se estudien el estado y las características de cubiertas, escaleras y forjados que consideran que no deben verse alterados. Esto impide llevar a cabo partes clave del proyecto como la instalación de un ascensor para garantizar la accesibilidad de los clientes.

No obstante, los promotores y técnicos de White van a seguir dialogando con los técnicos de Cultura –esta semana tienen prevista una reunión– para ver si pueden recabar finalmente un posicionamiento positivo a la intervención. Tras unos reparos iniciales, así lo han conseguido finalmente para un edificio contiguo con protección de grado 1 (Pozos Dulces, 25) en el que está previsto otro albergue turístico de 15 habitaciones, con capacidad para 86 plazas.