Puerto Banús se suma a la competición por desarrollar el puerto deportivo de San Andrés en Málaga

A las dos ofertas presentadas por los promotores del proyecto hotelero previsto en la plataforma del dique de Levante y por sociedades lideradas por Nicolás Mayol, conocido empresario de la naútica recreativa y el turismo de las Islas Baleares, se ha sumado una tercera iniciativa tras la que están los actuales gestores de Puerto Banús.

Así, la sociedad que explota la conocida marina marbellí se ha incorporado en esta segunda oportunidad a la competición por desarrollar el puerto de San Andrés, una destacada operación portuaria que está llamada a impulsar la conexión de la ciudad con los muelles al otro lado del Guadalmedina.

Asimismo, según fuentes consultadas, la oferta para este segundo concurso de los inversores del fondo catarí Al Alfia, que son quienes promueven el proyecto del hotel de gran lujo para el dique de Levante, se ha reforzado con la incorporación de Island Global Yachting (IGY), una compañía estadounidense internacional, líder en el mundo de gestión de marinas, que forma parte de la unión de empresas que acomete las obras para crear una marina de megayates en los muelles 1 y 2 del puerto.

Con estas tres ofertas sobre la mesa, la Autoridad Portuaria iniciará el proceso de evaluación y puntuación de cada una de ellas para resolver el concurso con el que adjudicar la construcción y explotación del puerto deportivo en la zona de San Andrés, una zona náutica con capacidad para un mínimo de 500 atraques en su lámina de agua, dimensionados para embarcaciones de hasta 30 metros de eslora, reservando dos para las de hasta 50 metros de eslora.

La concesión abarca una superficie de lámina de agua en la margen derecha de la desembocadura del Guadalmedina de 94.124 metros cuadrados, y una superficie de tierra en la explanada de San Andrés de 20.351 metros cuadrados. En tierra están previstos un mínimo de 300 plazas de aparcamiento; un complejo náutico con una altura máxima de ocho metros para un club náutico, una escuela de vela, restaurantes, actividades sociales y pequeños comercios (están expresamente prohibidos los bares de copas o similares); un centro comercial de 3.000 metros cuadrados en planta baja para locales de hosletería y establecimientos especializados en el sector náutico; un edificio para la capitanía del puerto y la torre de control (planta baja más dos más la torre de control); una instalación de suministro de combustible; y naves y talleres para la zona de varada en una superficie de 10.000 metros cuadrados como mínimo.

El plazo de concesión es por 50 años y la tasa mínima anual de ocupación del espacio establecida por el Puerto asciende a 335.735,18 euros. El plazo de ejecución de las obras que oferten las empresas no puede superar los dos años.