

Secciones
Servicios
Destacamos
The Shakespeare acaba de abandonar Málaga. El querido pub dedicado al poeta inglés acaba de cerrar sus puertas cuando estaba a punto de cumplir una década en el Centro. El cierre del establecimiento ubicado en Muro de Puerta Nueva ha dejado sin lugar de encuentro a una legión de vecinos de Málaga y residentes extranjeros de la ciudad.
El pub inglés abrió sus puertas a mediados de 2015 y al frente del negocio se encontraba Peter Edgerton, un músico de Liverpool que decidió montar su propio negocio para crear una comunidad alrededor de la cultura.
Los inicios, sin embargo, no fueron sencillos. La falta de recursos económicos le obligó a instalarse en una calle secundaria del Centro por la que apenas pasaba nadie. «Cuando abrimos éramos el único local que estaba abierto en toda la calle», recuerda. Fue tan complicado que al año se planteó el cierre. «Me di seis meses más de margen y entonces empezamos a funcionar».
El empresario, que se ha visto obligado a cerrar porque le ha cumplido el contrato y la propiedad ha decidido no renovárselo, explica que hubo varios factores que animaron a ese cambio: la apertura de un negocio enfrente, que dio más vida a la calle, la contratación de otra persona y la puesta en marcha de un juego de Trivial que ha funcionado hasta el último día.
Desde ese primer momento, The Shakespeare ha apostado por la celebración de actividades culturales. En su interior se han celebrado actuaciones musicales, exposiciones de fotos, de cerámica, de pintura y hasta charlas científicas informales ('Pint of Science'). «Estoy orgulloso de la oferta cultural que le hemos dado a la ciudad durante muchos años», reflexiona.
Pese a lo obligado del cierre, Peter se queda con lo bueno y con «clientes maravillosos» que asegura haber tenido a lo largo de tantos años. «Habíamos creado una comunidad de malagueños y de extranjeros que viven en la ciudad, ya que sólo un 20 por ciento de los visitantes eran turistas», resume. «¿Qué recuerdo me gustaría que quedara? Que ha sido un pequeño refugio en el Centro», añade.
A partir de ahora, el empresario prevé recuperar su afición a la música y seguir escribiendo relatos, su otra pasión. No se ha planteado -al menos por el momento- reabrir el pub en otra ubicación porque cualquier actuación requeriría de una inversión muy importante que no está en disposición de afrontar. «The Shakespeare ha sido la actividad que he hecho durante más años y ha llegado su final».
La vinculación de Peter con Málaga es del todo casual. Llegó a la capital con la intención de pasar sólo una noche tras realizar un viaje por Europa y nunca más se fue. Esa noche, allá por el año 1995, fue a tomar algo al antiguo O'Neill's y se encontró con tres chicas que buscaban a un hombre para que compartiera piso con ellas porque tenían miedo de un vecino. Y él no se lo dudó.
Lo que iba a ser una estancia temporal de unas semanas se prolongó en el tiempo porque el propio O'Neill's lo contrató como músico. Posteriormente enganchó ese trabajo con otro en Morrissey's y decidió que su sitio era Málaga. «Si no hubiera ido esa noche al pub y me hubiera quedado en la pensión, me hubiera vuelto a Manchester y mi vida hubiera sido completamente diferente», reflexiona.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.