Los primeros rascacielos escalan el cielo de Málaga

La Málaga de las torres, la de los rascacielos que se dibujaron en el Plan General de Ordenación Urbanística hace una década, comienza a materializarse. Los edificios que están llamados a cambiar para siempre el 'skyline' de la capital empiezan a escalar el cielo sin que muchos malagueños sean aún conscientes de hasta dónde llegarán. 20 metros más que la torre de la Catedral tendrá uno de los dos rascacielos que la promotora AQ Acentor levanta en los suelos que ocupó el rastro dominical en Martiricos. Esta empresa del fondo alemán Aquila Capital está detrás de los dos proyectos de torres que se encuentran en estos momentos más avanzados. Con una inversión total de 255 millones de euros, las obras de estas construcciones ya se hacen notar en el paisaje.

29 plantas más la baja. Es la altura que tendrán los dos rascacielos que AQ Acentor construye en Martiricos. La torre situada más hacia el sur (106,67 metros) albergará un local comercial en la planta baja y 252 viviendas en venta; y la situada hacia el norte incluirá un hotel de unas 315 habitaciones desde la planta primera hasta la 13, y 198 pisos en alquiler a partir de esa altura hasta la planta 29, que llegará hasta una cota de 111,53 metros, unos veinte más que los 90,85 metros de la torre del primer templo de la ciudad, incluido el pararrayos.

¿Cómo se construye un rascacielos? Más de 130 obreros de la empresa Avintia trabajan en las obras del proyecto de Martiricos, bautizado como AQ Urban Sky y diseñado por el estudio de arquitectura madrileño Morph. Iván Gómez, responsable de los trabajos, desvela el principal secreto de estas dos enormes construcciones: un sistema 'autotrepante' que permite ejecutar las plantas a partir de una especie de columna vertebral que va subiendo por sí sola gracias a un sistema accionado por mecanismos hidráulicos y mecánicos. «Este sistema permite elevar grandes conjuntos de encofrado simultáneamente sin necesidad de grúa», explica Iván.

A esa especie de núcleo central que sube por sí solo se van anclando las estructuras de las diferentes plantas, de ahí que esa columna vaya por delante de los forjados de los pisos. Unos paneles revestidos de negro sirven para proteger a los obreros que trabajan en la realización de los pisos. «Por ese núcleo central estamos subiendo el hormigón a través de unas tuberías, y cuando acabe la obra albergará los ascensores y las escaleras», detalla Iván Gómez, quien destaca que es la primera vez que se utiliza en España el sistema 'autotrepante' empleado para la torre norte (ATR-SC). «En la sur, que tiene una planta en forma de 'Y' no se puede usar, pero en la norte, que forma una huella en forma de 'T', sí es posible. No obstante, los dos son ATR, aportados por la empresa ULMA», apuntan desde AQ Acentor.

Este método de construcción permite avanzar mucho más rápido, subiendo una planta cada dos semanas, y otorga una mayor rigidez a los edificios en caso de seísmos. No obstante, los dos rascacielos de Martiricos están diseñados para hacer frente también a las rachas de viento más fuertes que les pueden afectar. Para ello, se hicieron unas maquetas de un metro y medio de altura, dotadas con entre 200 y 300 sensores, que se probaron en un túnel de viento. Este ensayo sirvió para saber los puntos en los que la estructura tiene que ser más rígida para que el viento no tire de ella hacia fuera.

Además, con esta forma de trabajar, las obras de las torres se pueden ir terminando por las plantas inferiores, mientras todavía sigue subiendo el núcleo 'autotrepante' por las más elevadas. De ahí que ya hayan empezado a colocarse paneles de la fachada de las plantas bajas en la torre sur.

La intención de AQ Acentor es que la estructura de los dos rascacielos esté terminada para el último trimestre de este año, y que la entrega de los pisos de la torre sur se produzca en la segunda mitad del 2023. «Ya tenemos reservadas el 60% de las viviendas», informa Iván Gómez, que asegura que todavía no le han puesto precio a los áticos. «Estamos estudiándolo, con esto de la pandemia es difícil acertar, saldrán a la venta a final de año», apunta. Por el momento, la vivienda más cara es un piso de la planta 25 con cuatro dormitorios, garaje y trastero, por más de 600.000 euros. Las dos torres se levantan sobre un aparcamiento de dos sótanos con capacidad para 535 plazas.

Cadenas hoteleras de primer orden a nivel internacional ya se han interesado por explotar el hotel de la torre norte, y AQ Acentor prevé igualmente ceder a un operador especializado la explotación de las viviendas en alquiler.

Pero donde el arrendamiento cobra un mayor protagonismo es en el proyecto AQ Jacarena que este mismo fondo levanta en la zona de La Princesa. En este caso, son tres edificios, sobre cuatro sótanos para 450 aparcamientos, que albergarán un total de 349 pisos para alquiler de larga temporada que empezarán a comercializarse este año. De estas tres construcciones, dos tendrán una altura de 14 plantas en total (46,25 metros) y un tercero alcanzará las 23 (74,15 metros). El edificio situado más hacia el sur, diseñado por el estudio de arquitectura HCP que lideran Javier Higuera, Alejandro Pérez y Mario Moreno, albergará 110 viviendas y estará terminado para finales de este año, y los otros dos, con firma del estudio de Ángel Asenjo, estarán listos en la primera mitad del año que viene, con capacidad para 90 y 140 viviendas, respectivamente.

En este caso, cambiará el panorama urbanístico de la zona de Cruz del Humilladero y Carretera de Cádiz la torre de 23 plantas más próxima al eje del AVE, cuya construcción, a cargo de Sacyr, también tiene el reto de la elevada altura, aunque con unos sistemas más convencionales. «Estamos levantando la estructura de los tres edificios al mismo tiempo para acabarlos prácticamente a la vez, como un conjunto homogéneo en el que las fachadas serán similares, con unos acabados en blanco y gris», comenta Elena Castro, responsable de este proyecto, que supone una inversión de más de 85 millones de euros en total.

Jacarena es el anticipo del mayor proyecto de torres previsto en Málaga en los cercanos terrenos de Repsol, junto a la avenida de Juan XXIII, donde están dibujados cuatro edificios de 28, 30, 32 y 34 plantas, respectivamente.

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