En plena feria de agosto, el Ayuntamiento de Málaga ha publicado este martes en su portal web de participación ciudadana el proyecto de las ordenanzas que regularán el cobro por la recogida de basuras a viviendas a partir del año que viene, por lo que ... el Consistorio apura el plazo dado por la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular de 2022, que obliga a repercutir en los ciudadanos el coste real de la gestión del tratamiento de los desperdicios que generan los hogares. Hasta ahora la basura doméstica se paga parcialmente dentro del recibo del IBI.
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Según lo recogido en el borrador de la ordenanza para fijar la cuota por la «recogida, transporte y tratamiento de residuos sólidos urbanos domésticos generados en las viviendas», están obligadas al pago de esta nueva tasa municipal aquellas casas que se encuentren a menos de 500 de un contenedor de la empresa municipal Limasam. Aquellos vecinos que entiendan que no cumplen ese requisito y, por lo tanto, están exentos del pago, tendrán que presentar un escrito al gerente de Limasam en el plazo de un mes desde la notificación de la factura por la que se exigirá el cobro.
La empresa de aguas Emasa tendrá un papel clave en el cálculo y cobro de la tarifa por la recogida de basuras que gestionará Gestrisam, ya que una parte de estas cuotas se establecerá en función del consumo de agua de la vivienda. Los obligados al pago son «las personas, físicas o jurídicas, así como las herencias yacentes, comunidades de bienes y demás entidades que, carentes de personalidad jurídica, constituyan una unidad económica o un patrimonio separado, beneficiarias del servicio, por las viviendas que ocupen o utilicen», según se detalla en la ordenanza. En ese sentido, se entenderá que la vivienda es ocupada o utilizada por la persona que tenga suscrito con Emasa un contrato de suministro de agua.
La futura tarifa, que empezará a cobrarse el año que viene, está compuesta de dos cuotas. Una es fija, por la disponibilidad del servicio, y tiene un coste de 0,256 euros por vivienda y día, lo que hace un total de 93,44 euros al año, más IVA. Eso será lo mínimo que tendría que abonar cada hogar por beneficiarse del servicio de recogida de basuras de Limasam. No obstante, a esa cuota fija, habría que sumar un cuota variable que está relacionada con el consumo de agua, un concepto que el Ayuntamiento entiende como adecuado para valorar el nivel de residuos que puede generar una vivienda y el número de residentes que la ocupan.
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Esa parte variable se medirá de dos formas. Para las viviendas que dispongan de contador de agua individual, se aplicará un cobro de 0,385 euros más IVA por metro cúbico de consumo de agua. Y para las que no dispongan de contador individual, se cobrará 0,094 euros más IVA por día, lo que suma 34,31 euros más IVA al año. Es decir, una vivienda que se encuentre en un edificio sin contador de agua independiente tendrá que pagar un total de 127,75 euros al año más IVA por la recogida de basuras. No obstante, la ordenanza establece una tarifa máxima de 0,6137 euros al día (224 euros más IVA al año) por vivienda.
Con todo, la ordenanza prevé algunas reducciones. Por el mero hecho de tener domiciliado el pago de la tarifa, se le aplicará una reducción del 3%. Asimismo, habrá rebajas para incentivar la economía circular. Para las viviendas con contador de agua individual, se aplicará una reducción desde el 0,5% hasta el 3% por la utilización de puntos limpios de recogida de residuos en el año anterior al cobro de la tarifa, que en todo caso será semestral, a periodos vencidos, por lo que el primer pago podría producirse a mediados del año que viene.
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Por la utilización en el año anterior de medios de compostaje domésticos, se aplicará un 1% de rebaja, y también experimentará una reducción por ese porcentaje el uso de servicios municipales de reutilización de residuos. Además, se aplicará una reducción de hasta el 3% a todos los inmuebles de zonas de la ciudad en las que Limasam aprecie un incremento interanual superior al 5% en la separación de los residuos por contenedores especiales para favorecer su tratamiento y reciclado. La empresa municipal de limpieza hará un análisis de oficio, o a petición de los vecinos interesados, para comprobar esa evolución. Asimismo, podrá aplicarse una reducción del 3% a las personas que durante el año anterior hayan sido beneficiarias de una ayuda de Emasa por tratarse de familias en un especial estado de necesidad.
Las viviendas turísticas no son consideradas en este caso como una actividad económica y pagarán la tarifa de un hogar normal. No obstante, para ellas existe desde enero de 2023 un cobro específico por el concepto de "prestación patrimonial" en relación a la recogida de basuras que obliga a sus propietarios al pago de una cuantía anual que oscila desde 63,9 euros más IVA para pisos de una a cuatro plazas hasta 255,6 euros más IVA para viviendas con capacidad para más de 12 personas.
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Málaga cobró una tasa específica por basuras hasta el año 2000, cuando el Ayuntamiento optó por suprimirla y compensar la pérdida de esos ingresos (en torno a 1.500 millones de las antiguas pesetas) con una notable subida del Impuesto de Bienes Inmuebles, que llegó a alcanzar el 20%. De ahí que hasta ahora se haya entendido que los ciudadanos contribuyen a sufragar el servicio de basuras dentro del IBI.
Por otra parte, el Ayuntamiento también ha elaborado el borrador de una ordenanza para el cobro por la recogida y el tratamiento de residuos para las actividades económicas que se lleven a cabo en la ciudad en función de su naturaleza, su ubicación y la superficie que ocupen. En este caso, las tarifas parten de una cuota base anual que se concreta en 330 euros para industria; 238,29 euros para comercio al por mayor; 389,88 euros para centros comerciales; 757,66 euros para comercios de alimentación; 195,43 euros para comercios minoristas; 1.026,79 euros para negocios de restauración; 1.149,73 euros para negocios de hospedaje (hoteles y apartamentos turísticos); 272,41 euros para ocio y cultura; 691 euros para centros educativos; 2.678,31 euros para hospitales; 257,78 para centros sanitarios y asistenciales; y 262,64 euros para servicios de atención al público.
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Ese precio base, sin IVA, se multiplicará por un coeficiente en función de la situación del edificio, para lo que se diferencian los que se encuentran en el Centro y los que está en parques empresariales. En el caso del Centro, por ejemplo, la cuota base de los negocios de restauración se multiplicará por 4,85, y los hoteles pagarán 4,07 veces esa tarifa mínima.
No obstante, hay un tercer coeficiente para multiplicar la nueva tarifa por recogida de basuras, en función de la superficie de la actividad, y también de su ubicación en la ciudad. Así, si tiene menos de 50 metros cuadrados, ese coeficiente es 1, pero si, por ejemplo, tiene entre 400 y 499,99 metros cuadrados, y se encuentra en el Centro, se multiplica por 2. En el caso de actividades que ocupen más de 800 metros cuadrados, el coeficiente es de 4,86 en el caso del Centro y de 13,78 en el casco urbano.
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