A primera hora de la tarde, sin ir más lejos, Eloisa Peñas, una vecina de Huelin, enfermera en un centro escolar de Málaga, ya conocía los efectos secundarios de lo que ella calificó como «fama pasajera». Una cascada de felicitaciones, llamadas al móvil y 'whatsapp' ... había descargado sobre esta jienense de 61 años, que lleva ya más de tres décadas afincada en Málaga. Hay quien vino aquí a por uvas. Ella lo hizo por amor. «Conocí a un malagueño, me casé con él y tengo tres hijos», explica en una conversación telefónica con este periódico.
A través de la publicación en SUR, precisamente, se enteró de que su propuesta para el cartel de la Feria de Málaga había sido elegida como ganadora para la edición de este 2024.
El cartel en cuestión, que lleva la firma de Peñas, es una biznaga y lleva por titulo 'Mi playa en Feria'. Es una pintura acrílica sobre lienzo en la que la biznaga adquiere cierta forma de sombrilla de playa para combinar así dos elementos esenciales de Málaga. El cartel de Eloisa Peñas es también la vuelta a las buenas esencias, después de algunos años en los que la Feria de Málaga quedaba ilustrada por trazos y diseños que se podrían categorizar como más minimalistas. «Tenía muy claro en mi cabeza lo que quería hacer. ¿Qué es más representativo de Málaga que una biznaja?», pregunta.
El cartel ganador no es fruto de una improvisación ni de un arrebato descontrolado. Según confiesa Eloisa, es la cuarta vez que participa en este concurso. Y a la cuarta llegó ese placer de la vida que es el verse como ganador. Algo que, en este caso, viene acompañado de ver a tu ciudad empapelada a un nivel que ni las grandes estrellas de rock. «Me hace mucha ilusión, obviamente», expresa.
Que las redes sociales sirven para comprobar que algunos tienen la cabeza muy mal amueblada también lo habría constatado. «Estoy intentando no hacer mucho caso, pero algunas cosas que he leído...», deja caer la existencia de algunas críticas desafortunadas.
Eloisa ya no se acuerda de cuándo adquirió el gusto por la pintura. «Sé que llevo pintando desde hace muchísimos años. Pintar es mi terapia», expresa. Con muchos aplaudiendo y con pocos criticando, la «fama pasajera» no hará cambiar a esta enfermera. Por si acaso le viene la tentación de divagar con otros mundos, ya está la realidad para poner las cosas en su sitio. «Mañana (por hoy), toca vacunar del papiloma», dice.
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