El Paseo Cerrado de Calderón resbala por todos los lados y para casi todos los que lo transitan – menos para los coches, de momento –. Lo que ocurre en esta zona tiene que ver con dos situaciones diferentes. En primer lugar, la zona de entrada a la urbanización tiene un peraltado diferente en el que ya se han resbalado y tenido accidentes varios conductores de moto: «Resbala cuando entras a la zona de solería, que puede quedar más bonito, pero que sin embargo hace que muchas ruedas se deslicen más de la cuenta. Hace dos años me partí el peroné tras un accidente y pese a las quejas presentadas, no hay manera de que esta zona no resbale» comenta V.C, lectora habitual de esta sección en conversaciones con este redactor.
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Por otro lado, los que no van en moto también se resbalan. Y es que por toda la zona – que está en cuesta – hay gran cantidad de hojas secas que invaden las aceras caídas de todos los árboles de la zona. Éstas, que no se recogen con la periodicidad suficiente, hacen que muchos malagueños que van caminando por este enclave sufran algún traspiés.
A esto hay que añadirle desperfectos en el muro y acumulación de basura en los aledaños, como se puede apreciar en una de las fotos que acompaña a esta noticia. En definitiva, el Paseo Cerrado de Calderón, que es la entrada a esta cotizada urbanización, que por cierto cada vez tiene más comercios, tiene asuntos que solucionar que tienen que ver directamente con la seguridad de sus viandantes.
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