La pandemia y el encierro no sólo no los paró, sino que los puso en marcha para impulsar una serie de acciones solidarias que se ... han convertido en una referencia de cuantas nacen desde la sociedad civil.
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Amigos de toda la vida, el restaurador Chicho Marín, el diputado provincial Juande Villena y la doctora Esther Ristori sumaron fuerzas y contactos para dar forma a tres acciones sociales que han tenido un profundo impacto en el entorno. La primera de ellas, 'Operación Potito', nació en lo más severo del confinamiento y permitió el reparto de más de 20.000 potitos entre familias vulnerables con menores a su cargo. En las pasadas Navidades, los tres repitieron con 'Operación Juguete', un proyecto que se tradujo en regalos de Reyes Magos para más de 1.500 niños.
Hace unas semanas volvían a la primera línea poniendo en el centro a los mayores que se enfrentan a la lacra de la soledad, la dependencia o la falta de recursos económicos. Esta 'Operación Abuelo' se materializa ahora con motivo de la llegada de los Reyes Magos y ha superado la cota de las 300 cartas y sus correspondientes regalos para los ancianos del Asilo de los Ángeles, el Banco de Alimentos de Ciudad Jardín, los servicios sociales del distrito Palma-Palmilla, los servicios sociales del Ayuntamiento de Coín y un grupo de personas mayores de Benalmádena. «Sólo hacen falta ganas de ayudar. Nosotros nos encargamos de todo lo demás», avisa Marín de cara a futuras iniciativas.
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