La Junta activa otra obra de emergencia contra la sequía en Málaga

Una de las actuaciones que se va a poner en marcha, que ya estaba prevista en el primer decreto, pero que no se ha llevado a cabo aún, es la puesta en funcionamiento de dos nuevos pozos situados en el Valle del Guadalhorce, Fahala y Aljaima, que podrían aportar entre 200 y 400 litros por segundo para el abastecimiento. La obra tiene un presupuesto de 5.745.603 euros y ha sido encargada a la empresa pública Tragsa, con un plazo de ejecución previsto inicialmente de diez meses.

La medida fue anunciada este jueves en la reunión de la comisión para la gestión de la sequía en la Demarcación de las Cuencas Mediterráneas de Andalucía. En el encuentro, al que acudieron representantes de las empresas gestoras del abastecimiento, ayuntamientos y los regantes, se puso sobre la mesa la delicada situación que atraviesan las reservas hídricas en la provincia, con apenas 217,5 hectómetros cúbicos almacenados en los siete embalses, al 35,5% de su capacidad, cuando hace un año tenían 320.

La situación más crítica se mantiene en el sistema de La Viñuela, al 10% de su capacidad, con 16,5 hectómetros, lo que está obligando a mantener la restricción total para el regadío de las 6.300 hectáreas del Plan Guaro acordada desde el pasado 1 de octubre, así como las aportaciones desde la capital para garantizar el abastecimiento de los alrededor de 220.000 habitantes, de 14 municipios. Así, se prevén aportar este año hidrológico 6,8 hectómetros desde la capital malagueña y otros 1,8 desde los pozos del río Chíllar, en Nerja.

Estos recursos hídricos se han tenido que reducir a la mitad en las últimas semanas al detectar «signos de agotamiento», tal y como ya publicó SUR. Los técnicos de la Junta advierten de que los niveles freáticos de equilibrio con los que comenzó el trasvase «están sufriendo unos descensos muy acusados, con lo que conviene proceder con cautela para esta fuente de recurso e ir observando la verdadera evolución».

Con este escenario, y si no se producen nuevas aportaciones al embalse en lo que queda de año hidrológico, la presa viñolera llegaría al próximo 30 de septiembre con apenas 11,9 hectómetros, el 7,29% de su capacidad, su mínimo histórico. Esta situación comprometería gravemente el abastecimiento de buena parte de la comarca oriental, especialmente de Vélez-Málaga y Torre del Mar. La Junta ha vuelto a pedir a los ayuntamientos que reduzcan el consumo por debajo de los 200 litros por habitante y día.

Igualmente, la Administración regional ha acordado también reducir en un 5% la dotación para el abastecimiento de la capital desde los embalses del Guadalhorce, que están a punto de entrar en situación de escasez severa, por debajo de los 140 hectómetros cúbicos. Esta merma se compensará con otros recursos alternativos, como el azud de Aljaima y las presas de Casasola y El Limonero. Desde la Administración regional han insistido en que el abastecimiento a la población de la Costa del Sol está garantizado para los próximos meses.

Por su parte, los regantes del Guadalhorce verán reducida la dotación que reciben en lo que queda de año hidrológico desde los embalses en un 25%, tal y como ya avanzó este periódico. El secretario de Aprema, Juan Antonio Aguilar, no asistió a la reunión y volvió a criticar la antigüedad de las canalizaciones, que les hacen perder «un 25% del agua», un problema histórico en la zona. Además, denunció que hay averías «constantes», como la del sifón de Cártama y otra en Campanillas, que mantienen sin recursos a 1.800 hectáreas de cítricos y subtropicales.

Por su parte, el secretario general del Agua de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural y presidente de la comisión para la gestión de la sequía, Ramiro Angulo, agradeció «el enorme esfuerzo y la comprensión de todos los usuarios, ayuntamientos, regantes, organizaciones agrarias y asociaciones que realizan ante el mantenimiento de las medidas limitantes del uso del agua, así como el impulso de campañas de concienciación de implantar entre sus poblaciones y asociados un uso eficiente del agua». Angulo aseguró que «desde el ejecutivo regional y la propia Comisión se mantendrá un seguimiento continuo de la situación hidrológica y, en función de la evolución, se podrán revisar las medidas aprobadas.

Por su parte, el representante de la asociación agraria Asaja, Benjamín Faulí, volvió a pedir a las administraciones «un esfuerzo extra» para ejecutar las obras pendientes para el regadío y el abastecimiento, especialmente la desaladora. Así, el técnico dijo que se presenta un verano «muy duro» para los agricultores de la provincia en general, especialmente en la Axarquía. «Estamos teniendo un gran deterioro de la calidad del agua por la salinidad que presenta la que llega regenerada de las depuradoras«, expresó.

Por su parte, la representante de Ecologistas en Acción, Librada Moreno, reclamó que se deje de aumentar la superficie de regadío en la provincia y que los trasvases y otras medidas «no sirvan para aumentar la oferta de agua». Asimismo, pidió que se mantengan los caudales ecológicos de los ríos. «La situación es crítica, tenemos que adaptarnos todos, es el cambio climático y llegamos tarde», apuntó.