Las cifras del nuevo Melillero para un verano histórico en el Puerto de Málaga

El barco es un 'cruise ferry', esto es, un ferry de alto nivel, con una capacidad para 1.670 pasajeros. Para que sirva como referencia, los que cubrían la conexión actualmente entre las dos orillas rondaban los 800-900 viajeros. Dispone además de 261 camarotes, espacio como para 547 automóviles y puede albergar hasta 2.600 metros lineales de carga en sus dos cubiertas de bodega. Una comitiva encabezada por el alcalde, Francisco de la Torre; y el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, ha asistido hoy a su presentación pública, guiada por el capitán, Jorge Alonso Castosa; y el delegado de la zona Sur de la compañía, Manuel Rejano.

El ferry es de nueva construcción y tiene 187 metros de eslora y 31 de manga. Ha sido fabricado en astilleros entre Alemania y Noruega, y se ha finalizado en Polonia. A nivel mecánico, su principal característica es que el sistema de propulsión del buque es totalmente eléctrico y dispone de una planta de generación alimentada con motores duales a gas natural licuado (GNL). En caso de no disponer de suministro, también permite navegar con otros combustibles. De hecho, estos motores pueden alternar el consumo de fuel y gas natural, y están preparados para navegar con otras fuentes renovables. Con este, Baleària ya dispone de una flota de 11 buques dotados con esta tecnología, entre nuevas construcciones y remotorizaciones.

Además, pero mejorar las maniobras, el 'Rusadir' está equipado con dos hélices transversales a proa y una a popa, con alta potencia, y que, junto con los motores principales, permiten una gran maniobrabilidad, incluso sin necesidad de remolcador para las maniobras de atraque. De esta forma, el barco puede alcanzar velocidades de 22 nudos, con máxima estabilidad gracias a un sistema de aletas retráctiles de accionamiento hidráulico. A ello, se añaden otras innovaciones técnicas que minimizan los ruidos y las vibraciones.

A bordo del nuevo ferry, lo que más llama la atención de quienes estén acostumbrados a viajar en este tipo de barcos es la calidad de los acabados, con butacas de piel y camarotes amplios, equipados con baño y televisor, en los de mayor categoría; así como dos cafeterías, un bar de autoservicio, un restaurante a la carta, tienda, zona infantil, discoteca, sala de cine, sala de rezo y zonas de descanso con grandes ventanales con vistas al mar. Además, dispone de Wifi para los pasajeros.

Entre la Ciudad Autónoma y el puerto malagueño se hacen actualmente seis rotaciones semanales, mientras que los sábados conecta con Almería, dentro del contrato de servicio público que Baleària tiene adjudicado por el Ministerio de Transportes. De lunes a viernes, sale de Melilla a las doce de la noche y llega a la capital malagueña a las 7.00 de la mañana.

En el sentido contrario, sale a las 15.00 y llega a las 21.00 horas, ya que, aunque la travesía está fijada en seis horas y media, gracias a su potencia y velocidad de crucero, lo puede completar en menos tiempo. A partir del 22 de junio, con motivo del inicio de la Ope, se incorporará una salida adicional los sábados, de manera que habrá conexión de lunes a domingo.

«Lo normal es que este año superemos las cifras de pasajeros de 2019», afirma el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio. «Verdaderamente, este año sí que podremos decir que hemos superado completamente el bache de la pandemia». «Es un barco que se podría asemejar a un crucero, es un salto de calidad», añade el capitán del 'Rusadir'.