Una empresa malagueña proyecta un nuevo centro de negocios en la calle Larios

El nuevo proyecto se denomina Longfellow y se promociona como un club profesional de alto nivel; un espacio de trabajo flexible en formato de club exclusivo de negocios dedicado a empresarios, profesionales y directivos que requieren de un lugar representativo para su actividad. El espacio cuenta con una superficie cercana a los 300 metros cuadrados y ha sido diseñado por el estudio de interiorismo Lago Interioriza.

El responsable del proyecto es el empresario David Martín, quien reconoce que surgió a la hora de buscar un espacio adecuado para establecer la sede de su empresa, que se dedica a realizar proyectos residenciales y terciarios. Comenzaron buscando en el entorno 'prime' de la ciudad, sobre todo en la Alameda Principal y la calle Larios, pero pronto se dieron cuenta de la poca oferta disponible. «Mi sorpresa fue que no había nada reformado a un precio competente».

En un segundo paso comenzaron a buscar espacios de trabajo flexible o coworking, pero tampoco encontraron nada adecuado a sus necesidades y a los servicios que iban a necesitar. Los coworking -dice- son flexibles, pero anodinos y sin carácter propio ni identidad«, resume.

Y por eso se lanzaron a crear su propio proyecto. Localizaron un antiguo espacio de oficinas sin rehabilitar y se pusieron manos a la obra. «Nuestra idea es crear un espacio de trabajo flexible con el concepto de club de negocios boutique, donde los empresarios se sientan identificados y reciban todos los servicios que necesiten». Como no podía ser de otra forma, ellos serán los primeros inquilinos del nuevo espacio.

El nuevo centro está dirigido a empresas y profesionales de alto nivel, tanto nacional como internacional, que requieran un espacio representativo en la ciudad y estén relacionados con el sector inmobiliario, financiero, urbanístico o técnico con la idea de que se puedan crear sinergias entre los diferentes inquilinos.

Martín avanza que el periodo mínimo de ocupación será de tres meses, ya que está pensado para que tenga una rotación baja. «Queremos que se base en la confianza; de alto nivel, y no que sea un sitio de rotación». Cada uno de los interesados, de hecho, podrá amueblarlo a su gusto y adaptar la decoración a su propio estilo. El centro tendrá capacidad para 35 personas, siete despachos y una sala de juntas compartida.

Respecto al interiorismo, desde el estudio Lago Interioriza aseguran haber rediseñado la estética desde la óptica del siglo XIX. Para ello utilizan grises, marrones y negros en paredes con molduras para economizar y aportar elementos sofisticados a las estancias. En algunas de ellas utilizan incluso iluminación oculta para crear ambiente y mostrar la modernización.