Nico Sguiglia da el paso para ser el candidato de Podemos a la Alcaldía de Málaga

Volviendo a las incógnitas en los grupos de la izquierda, lo que sí que ha quedado ya despejado es el paso al frente de Sguiglia para ser el candidato de Podemos a la Alcaldía de Málaga. Por lo pronto, ya ha inscrito su nombre en el proceso de primarias internas que la formación morada abrió el pasado lunes 10 de octubre. La votación se celebrará desde el 28 de octubre al 3 de noviembre. Si ganara estas primarias, que en los círculos de la formación se da prácticamente por hecho dado su papel destacado en los últimos años, el siguiente paso quedaría sujeto a los acuerdos que los partidos de izquierdas puedan cerrar a nivel nacional para concurrir juntos en las municipales. A día de hoy, se antoja complicado, pero a ocho meses de los comicios nadie se atreve a descartar un pacto para volver a ir de la mano.

Sguiglia, de 45 años y licenciado en Sociología y Ciencias Políticas, entró en el Ayuntamiento de Málaga en el anterior mandato como técnico del grupo municipal Málaga Ahora (marca blanca de Podemos) y, en el actual, como concejal. En su camino hacia las elecciones municipales, ha conformado un equipo en el que como número dos figura la actual concejala y exportavoz de Unidas Podemos, Paqui Macías, que hace unas semanas dio un paso al lado por cuestiones personales.

El resto de la lista en este proceso de primarias lo completan la experta en políticas feministas Micaela Jiménez, el bombero Juan Ramón González Trigueros, la educadora social Toñi Rubio, el economista Francisco González, el abogado Miguel Ruíz, la maestra de educación especial Carmen Navajas y el politólogo y miembro de la asociación juvenil Rebeldía, Alejandro Márquez, junto con dirigentes vecinales como Inmaculada Viñolo (Churriana), Juan Jiménez (Palma-Palmilla) y María Conejo (Federación Solidaridad).

“Durante demasiado tiempo nuestra ciudad ha estado gobernada por mercaderes, dando la espalda a las necesidades de la gente trabajadora y utilizando las instituciones para promover los negocios de unos pocos. Es el momento de contar con un Ayuntamiento donde los barrios y la vida de sus vecinos y vecinas sean el centro de la política municipal, que emprenda el giro verde y social que necesita nuestra ciudad y en el que prime siempre el interés general frente al beneficio privado", afirma Sguiglia.