Morillas reivindica el patrimonio de Málaga en la vieja casona de Dos Aceras

El inmueble, a juicio de la portavoz de Con Málaga, no tiene un nivel de protección arquitectónica adecuado, ya que ostenta el II, cuando consideran que es esencial que tenga el I, lo que se aprobó ya en 2012, es decir que esta opinión la suscribió la mayoría de la Corporación. En vistas de que la vieja casona sigue a la deriva, Morillas demanda con urgencia que el equipo de gobierno del PP impulse la tramitación del expediente de la junta de gobierno local del año 2021 por el que se iban a incorporar 28 inmuebles al catálogo de edificios protegidos del PGOU. «La inacción del PP, del alcalde Paco de la Torre y de la Gerencia de Urbanismo han provocado que uno de ellos ya haya sido demolido, Villa Atalaya, en Monte Sancha (paseo Salvador Rueda, 5), que fue derruida por la promotora Parque Málaga el pasado mes de agosto, de lo que informaba Jesús Hinojosa (SUR, 30/8/2023). Como se explicaba, la protección arquitectónica de este edificio estaba en estudio por parte del Ayuntamiento. La promotora completó su derribo para dar paso a un proyecto de siete viviendas para el que ya había solicitado la licencia de obras. La demora de la Gerencia Municipal de Urbanismo en tramitar el expediente para revisar la protección de este y otros 27 inmuebles de la ciudad, que se activó en 2021 y aún no se ha completado, permitió a esta empresa obtener la autorización para la demolición.

Para Morillas, la piqueta acecha, después de Villa Atalaya y Villa Maya hayan caído, ésta última con el gran valor simbólico que tenía para la ciudad la historia del Schindler malagueño, el cónsul mexicano Porfirio Smerdou, que salvó la vida de 567 personas de ambos bandos (avenida República Argentina, 19). La familia que la habita la levantó con características arquitectónicas a la original, pero si la protección hubiese sido integral esto no hubiese pasado, como subrayan en Con Málaga.

En esta jornada, delante del impresionante edificio, que ha sufrido importantes transformaciones en la primera planta para instalar en épocas pasadas unos comercios, que ya están cerrados, la portavoz municipal pide que no vuelva a pasar lo mismo. Para Morillas, esta dejadez del Ayuntamiento y de la Gerencia de Urbanismo no es «casual». «La destrucción del patrimonio va más allá de que se pierdan edificios, detrás de todo hay un modelo de ciudad con el estamos totalmente en contra. Defendemos el valor y la singularidad de los inmuebles de Málaga y renegamos del modelo franquiciado y de especulación inmobiliaria. Hay todo un recorrido hasta que se llega a la demolición de los edificios, pasando por la dejadez y la falta absoluta de cuidado del patrimonio. Esto no es una cosa fortuita, hay una voluntad política expresa y manifiesta», puntualiza.

Morillas, que llevará este asunto a la primera comisión de Urbanismo de este mandato municipal el próximo lunes apunta a tres como los objetivos de su propuesta. Primero, que se agilice la tramitación de la protección de estos 27 inmuebles (uno ya no podrá ver esta mejora como es Villa Atalaya), y que se incorporen al Catálogo de Edificios Protegidos del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU); que se revise a su vez el catálogo del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) Centro para que Málaga cumpla con los requerimientos de la Ley de Patrimonio Histórico Andaluz de la Junta, y que los servicios técnicos de la Gerencia de Urbanismo elaboren un plan director para la rehabilitación y conservación de las haciendas, villas, casonas, cortijos, lagares y en general edificios históricos del XVI, XVII, XVIII, XIX y principios del XX protegiéndolos para asegurar su preservación. Este tema se tratará en profundidad en la comisión de Urbanismo, ya que el PSOE lleva también una propuesta en esta línea. «Málaga no se puede permitir que se tiren más edificios históricos», puntualiza Morillas mientras deja atrás la calle Dos Aceras y la casona en ruinas.