Málaga prepara un proyecto de más de tres millones de euros para poner en valor el Castillo de Gibralfaro

La situación de conservación que presentan las dos antiguas fortalezas de Málaga es manifiestamente mejorable, pese a que se trata de dos de los monumentos más visitados de la ciudad. Zonas de las murallas de la Alcazaba permanecen aún apuntaladas con tablones de madera, y tampoco faltan puntales para sostener algunos elementos del castillo de Gibralfaro, donde hace cinco años se desmoronó parte de su lienzo norte, que ahora ha empezado a ser reparado por el Ayuntamiento tras un lustro de discusiones técnicas con la Junta de Andalucía, que tiene la última palabra sobre las intervenciones en ambas construcciones.

Precisamente los reparos puestos por la delegación de la Consejería de Cultura han impedido hasta ahora al Consistorio actuar con mayor diligencia en la ejecución de obras de reparación en la Alcazaba y Gibralfaro, pese a que llevan años proyectadas y con partidas presupuestarias reservadas. No obstante, como avanzó SUR el 30 de agosto del año pasado, la Junta se abrió a autorizar finalmente los trabajos más perentorios, al tiempo que sigue exigiendo la elaboración de nuevos planes y estudios técnicos para avanzar en nuevas medidas de mejora de las dos fortificaciones. Así, el Ayuntamiento ha tenido que realizar un escaneo en tres dimensiones de las murallas de la Alcazaba y Gibralfaro.

Dentro de esa dinámica, la Gerencia Municipal de Urbanismo ha elaborado un proyecto de mejora del castillo de Gibralfaro para el que se ha estimado un presupuesto de 3,2 millones de euros. Esta intervención preventiva para poner en valor este monumento se ha basado en cinco aspectos. Por un lado, se pretende mejorar el estado de conservación de la construcción con la redacción de un proyecto de obras acompañado de un plan de mantenimiento para hacer un seguimiento periódico que permita detectar daños y evitar situaciones como el desmoronamiento de un muro que se produjo en noviembre de 2018.

Asimismo, el proyecto tendrá una vertiente ecológica y paisajística, con el acondicionamiento de un recorrido por el entorno inmediato del castillo, y mejoras para conectarlo con la vegetación del monte en el que se encuentra, potenciando la recuperación de la vegetación autóctona mediterránea, y evitando el crecimiento de malas hierbas.

Desde el punto de vista del visitante, se prevé redactar y ejecutar un proyecto museográfico para poner en valor la historia del castillo, como elemento de la arquitectura militar, relatando la vida y costumbres de las personas que lo habitaron. Así, se plantea la «adecuación de itinerarios y espacios para la estancia, la contemplación y el descanso de visitantes», según han señalado desde Urbanismo; y la creación de rutas para conectarlo con la Alcazaba, el Teatro Romano y La Coracha.

Respecto a la accesibilidad del monumento, se prevé habilitar una ruta «accesible» con espacios de estancia, así como mejoras en la señalética, con nuevos paneles, mobiliario urbano adaptado para personas con dificultades de movilidad, la renovación de la iluminación interior y una ruta con un servicio de vehículos eléctricos en lanzadera.

Por último, el proyecto elaborado por el arquitecto Rafael Pozo García-Baquero para Urbanismo contempla medidas divulgativas como la edición de folletos y la actualización de la información sobre el castillo en la web del Ayuntamiento.

No obstante, todas estas medidas requieren de un permiso previo de la Consejería de Cultura, cuyo visto bueno a las actuaciones más urgentes a realizar en el conjunto de la Alcazaba y Gibralfaro ha permitido a la Gerencia de Urbanismo ultimar ya la contratación de dos intervenciones. Así, según ha informado el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, ya están a punto de salir a concurso los trabajos para la primera fase de esas reparaciones, valorada en 88.541 euros.

En total, son 16 las medidas de intervención planteadas, ocho para cada uno de los dos monumentos. En el caso de la Alcazaba, las actuaciones autorizadas son la reparación del muro del jardín en la calle Juan Temboury y retirada de árbol; actuación de consolidación y restauración del muro junto a la Puerta del Haza; consolidación y restauración de lienzo central del frente sur; refuerzo de restos del silo; reparación de la pérgola de la cafetería; reparación del lienzo frente a Torre del Homenaje; instalación de testigos e instalación de cambiador de bebé en aseo.

En cuanto a Gibralfaro, se contemplan la reparación de la red de saneamiento, la consolidación y restauración de garitas y pozos; la eliminación de encharcamientos en la zona de acceso; el arreglo de un muro de contención, la reparación del mostrador de mármol; la consolidación del murete del Patio de Armas; la instalación de cambiador de bebés en aseos y la sustitución de solados en almacenes.

Por otra parte, López también ha anunciado la próxima licitación de las obras de la primera fase del plan para facilitar el acceso de los ciudadanos al monte Gibralfaro, con las medidas contempladas en la ladera sur, por importe de 1,3 millones de euros. En este caso, se habilitará un sendero peatonal seguro desde el paseo de La Coracha al camino de Gibralfaro.

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