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Hasta el próximo 20 de junio no se sabrá si Málaga es la ciudad elegida para albergar una exposición internacional en el año 2027. Para ese día está prevista la celebración en París de la asamblea de países de la Oficina Internacional de Exposiciones en la que se votará el lugar elegido para ese evento, por el que también compiten Bloomington (Estados Unidos), Phuket (Tailandia), Belgrado (Serbia) y San Carlos de Bariloche (Argentina). No obstante, el Ayuntamiento de la capital sigue dando pasos para la definición del proyecto, como si Málaga ya hubiera sido seleccionada para albergarlo.
Así, el Consistorio ha anunciado este lunes que tiene previsto sacar a concurso en los próximos días la contratación del anteproyecto del anillo ideado para albergar los pabellones de la Expo 2027 en los terrenos de Buenavista, entre la autovía de Campanillas y los suelos de Intelhorce. Esa contratación se realizará por medio de la empresa municipal Promálaga, que convocará un concurso con un presupuesto de licitación de 2,6 millones de euros, y un plazo de presentación de ofertas de 20 días.
No obstante, las reglas de ese concurso establecen que existen dos fases, ligadas a que Málaga sea o no la elegida en junio. Así, el Consistorio demanda un primer trabajo de esbozo del anteproyecto a realizar en dos meses y medio, por un importe de algo más de 600.000 euros. Ese diseño tendrá que estar acabado antes de la votación de junio.
El resto del presupuesto del contrato, unos dos millones de euros, solo se ejecutará si la candidatura de Málaga es la seleccionada. En ese caso, en el plazo de seis meses y medio, la empresa de arquitectura contratada tendrá que entregar al Ayuntamiento el proyecto redactado para seguir avanzando hacia la contratación de las obras.
«El ámbito de actuación comprende, en lo relativo a las edificaciones, el edificio del anillo perimetral, el espacio central con pabellones especializados y un auditorio, dos áreas de servicio externas y los puntos de acceso. En lo que respecta a los espacios exteriores, incluye zonas de aparcamiento, el tratamiento del arroyo Merino y el acondicionamiento paisajístico», han explicado desde el Ayuntamiento.
Cada uno de los países representados en la Oficina Internacional de Exposiciones emitirá un solo voto de forma secreta por una de las candidaturas. En este caso, al existir más de dos candidatos a la Expo 2027, sería necesaria una mayoría de dos tercios para que un país fuera elegido en la primera vuelta. Si no es así, se elimina la propuesta que recibe el menor número de votos y se repite ese procedimiento hasta que solo quedan dos candidatos. Entonces, el país anfitrión se elige por mayoría simple. Así, resulta clave en todo este proceso la labor diplomática que realice el Gobierno de España en los próximos meses, y en la que ya está inmersa.
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