Grietas en las paredes o suelos y puertas y ventanas que no encajaban eran indicadores de problemas estructurales en el edificio. Lo que nadie podía aventurar es que fueran tan importantes como para poner en serio peligro el colegio y con él, a los niños y niñas, maestros y empleados. El colegio Intelhorce tendrá que ser demolido después de que los técnicos hayan determinado que los daños estructurales son tan severos, que el refuerzo de la cimentación no garantizará la seguridad del edificio en el futuro. De esta manera, la decisión de la Consejería de Educación y Deporte ha sido proceder a la demolición del edificio y levantar un nuevo colegio en el mismo lugar.
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La delegada de Educación, Mercedes García Paine, explica que la decisión adoptada es consecuencia de los informes técnicos que han determinado patologías estructurales severas. Aunque los alumnos podrían ser escolarizados en centros cercanos, Educación ha decidido levantar de nuevo el colegio en el mismo lugar que ocupa ahora.
Los alumnos del CEIP Intelhorce no pudieron comenzar el curso 2019/20 en su colegio. A principios de septiembre se informó a los padres de que el colegio debía ser desalojado para proceder a los trabajos de refuerzo de la cimentación. Desde entonces sus cerca de cien alumnos reciben sus clases en el colegio El Tarajal.
Aunque en principio se pensó en que el refuerzo de los elementos estructurales sería suficiente, y la obra se presupuestó en 200.000 euros, con el paso del tiempo las deficiencias se agudizaron y nuevos informes técnicos han determinado la conveniencia de derribarlo y hacerlo de nuevo, pues el coste de las reformas se ha disparado.
La Consejería de Educación y Deporte, a través de la Agencia Pública Andaluza de Educación, ya ha adjudicado el servicio de redacción de proyecto y estudio de seguridad y salud, dirección de obra, dirección de ejecución de obra y coordinación de seguridad y salud para la sustitución integral del colegio. El contrato ha sido adjudicado al arquitecto Juan Antonio Moya Romero por un importe de 212.032 euros. El nuevo colegio está presupuestado en 3 millones de euros.
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Los trabajos en el CEIP Intelhorce consistirán en la demolición de los dos edificios que componen el centro y su sustitución, en la misma parcela, por uno de nueva construcción, con una línea de Infantil y otra de Primaria. La nueva construcción contará con algo más de 2.030 metros cuadrados, distribuidos en zona docente, espacios comunes y área de administración.
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