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Koker. Puede que aún no te suene. Pero quédate con este nombre. Es uno de los grupos más punteros de la moda patria. Nació en Toledo en 2014 con el concepto 'low cost' como bandera y la filosofía de Inditex como fuente de inspiración. En ... la industria textil son muchos los que ya lo han bautizado ya como el 'Primark' español. Y es que sus precios se aproximan bastante a los del gigante irlandés y sus tiendas tienen una alta rotación de productos que sigue el ejemplo de éxito de Zara. Dos ingredientes que explican el espectacular despegue de esta compañía, que ya cuenta con más de 40 tiendas en 7 países y en cuya hoja de ruta está Málaga. Así, actualmente la firma tiene un establecimiento en la capital - en Calle Moreno Carbonero, 4- y ahora amplía su apuesta por el Centro de la ciudad con un nuevo local dedicado a su firma más sostenible- Moolberry- que abrirá en calle Compañía número 35 y que como matizan desde la empresa su sistema de trabajo no tiene «nada que ver» con el de Primark en cuanto a su compromiso con los objetivos de desarrollo sostenible y su fabricación en Europa.
Así, como detallan,, su filosofía de empresa se basa en una imagen del local y presentación de producto «muy cuidada». Prendas diseñadas y fabricadas en Italia y España, «con patronaje y tallas aptas para todo tipo de cuerpos apostando por la mujer real» y colecciones semanales adaptadas a las últimas tendencias. «Fabricamos pocas prendas por modelo para evitar que las clientas sientan que van uniformadas y apostamos por precios asequibles sin renunciar a la calidad y el diseño», subrayan.
Koker ya opera en Málaga. Ahora desembarca su hermana pequeña: Moolberry. Su firma basada en objetivos éticos y moda comprometida. Se trata de una marca que basa su oferta en tres ejes: sostenibilidad, comodidad y calidad. Para ello propone colecciones confeccionadas en tejidos naturales en colores neutros y en fábricas que garantizan artículos saludables, seguros y medioambientalmente sostenibles.
Al respecto, explican que todos los proveedores de Moolberry y sus instalaciones cumplen con un código de conducta y con los requisitos establecidos en sus estándares y en sus listas de sustancias químicas restringidas. Se trata así de la primera marca de moda que ha conseguido el sello ISSOP por su compromiso con el medio ambiente, la gestión de residuos y la lucha contra la obsolescencia programada.
El proyecto, liderado por Priscilla Ramirez, nació en otoño de 2014 en Toledo donde abrieron su primera boutique. La marca ha apostado principalmente por la fabricación en España e Italia y por un estudiado patronaje con talla única que sienta bien a la mayoría de las mujeres, independientemente de su edad, peso o forma de cuerpo.
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