José del Río se despide de la política tras estar 23 años en el Ayuntamiento de Málaga

Del Río, que ha sido prolífico en anécdotas con el alcalde, y que ha hablado de él como jefe y amigo personal, ha sido especialmente cariñoso también con la portavoz popular, Elisa Pérez de Siles, quien a su vez le ha agradecido todo lo que aprendió con él cuando entró a trabajar a sus órdenes en los tiempos en los que éste fue coordinador de distritos, un área que se creó en 2004. El alcalde Francisco de la Torre le ha agradecido su trabajo, «que sigues haciendo, una labor espléndida que has ido desarrollando en estos más de 20 años que tan bien has resumido». Al igual que Del Río ha subrayado la importancia de atender las necesidades de los vecinos en los distritos para solucionar sus problemas.

Como la lista popular se va clareando, y ya salieron dos concejalas clave como Gema del Corral y Ruth Sarabia, ahora delegadas en la Junta, recientemente se marchaba el concejal de Juventud y Educación, Luis Verde, era esencial preguntarle al alcalde por la confección de la lista popular para las próximas elecciones municipales del 28M, y si había dirimido ya quién será su enigmático número dos. «No es tiempo de hablar de este tema», decía, y pedía a los medios de comunicación que no fueran tan impacientes, porque en la actualidad estaba en las tareas de gobernanza de la ciudad y todavía no estaba en los asuntos de la confección de la lista.

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Del Río explicaba a este periódico que entró en el año 2000, con la otrora alcaldesa de Málaga y medalla de la Ciudad, Celia Villalobos, de la mano de los concejales Víctor González y Mariví Romero, y que en esa fecha inició su andadura como director del distrito de Campanillas. No era su primer contacto con el partido porque él ya era vocal del PP en Ciudad Jardín cuando era concejal José Luis Gallardo Sarasúa. Para dar este paso, tuvo que dejar a su mujer, Milagros, a cargo de las autoescuelas que tenía con su nombre e iniciar la andadura municipal. En 2003 pasó a ser director de Bailén-Miraflores, de 2004 a 2014 coordinador de distritos, mientras que en 2012 ya había entrado para sustituir a Víctor González, ahora viceconsejero de Turismo y Cultura. Concejal de Deportes, director de Málaga Deportes y Eventos, y concejal de Movilidad en los últimos cuatro años.

Del Río indica que es la hora de marcharse, que la vida de un concejal es estar 24 horas pegado al teléfono, y que «es el momento de dar un paso atrás», comentaba añadiendo que creía que «toca disfrutar de la vida, de la familia, de sus cuatro nietas, Naiara, Leire, Noa y Lucía», que nombra de carrerilla, y que por supuesto dedicará más tiempo a una de sus pasiones que pocos conocen: la pintura. Él lo llama hobby, aunque sus composiciones no son de amateur.

En los últimos tiempos la denuncia de la oposición, PSOE y Unidas Podemos, sobre irregularidades en Smassa, que está en los juzgados, le ha llevado a intervenir en los plenos realizando categóricas defensas en favor de su gerente, Manuel Díaz, y comparándolo con el caso de Villas del Arenal en los que estuvieron involucrados los populares Teresa Porras y Francisco Pomares, y que finalmente se archivó sin más consecuencias. «Reinciden en el error de cuando denunciaron el caso de Villas del Arenal; ni creen ni respetan la presunción de inocencia, dañan el honor y la reputación de personas que de momento son inocentes», que les decía con ahínco a la oposición en la sesión plenaria del pasado mes de enero. Aunque Del Río defiende sin ambages la gestión de la empresa municipal de aparcamientos, los debates ante la oposición en los últimos tiempos le han generado muchas situaciones de tensión y un gran desgaste personal, un duro trabajo que le han venido agradeciendo todo este tiempo sus compañeros ediles del grupo popular, sobre todo la portavoz Elisa Pérez de Siles.