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La Sociedad Española de Virología (SEV) celebrará su XVI congreso en el hotel NH de Málaga entre el 6 y el 9 de septiembre. El presidente del congreso es Jesús Navas Castillo, virólogo que trabaja en el Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea 'La Mayora', ... centro mixto de la Universidad de Málaga y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). En esta entrevista, Jesús Navas asegura que hay que cuidar y financiar la ciencia y la virología, porque son las que van a salvar a la humanidad de muchos problemas. Respecto a la pandemia este virólogo dice: «Hemos sido protagonistas en primera fila de algo que parecía una película de ciencia ficción». El presidente del congreso de virología que se desarrollará en Málaga la próxima semana pide a la población que mantenga la prudencia ante el Covid y afirma: «Lo que ha sucedido con el coronavirus, sobre el papel era algo posible, pero nadie creía que fuese a pasar».
–¿Cuántos expertos participarán en este congreso de la Sociedad Española de Virología?
–Contamos con unos 280 participantes. No solo vienen virólogos españoles, también asistirán en torno a una decena de expertos de países como Estados Unidos, Reino Unido y Uruguay, entre otros. Esta será la primera vez que nuestro congreso se celebre en Málaga. El anterior fue en Barcelona en 2019. Nos reunimos cada dos años, pero por la pandemia hubo que retrasar un año este congreso.
–¿Es complicado organizar un evento de estas características?
–Efectivamente, resulta complicado porque hay virología de humanos, de animales y de plantas. Igualmente, hay que contar con la gente que hace investigación básica, la que se dedica a la docencia y con los profesionales que trabajan en hospitales. Yo, que formo parte de la Sociedad Española de Virología y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, tenía el encargo de traer el congreso a Málaga, una ciudad que es muy atractiva.
–Supongo que el Covid-19 será uno de los temas estrella del congreso, ¿verdad?
–Evidentemente. Tenemos una sesión específica sobre vacunas Covid, así como una mesa redonda sobre coronavirus en general. Además, habrá comunicaciones individuales, tanto orales como en póster, que tratarán del Covid. Hay muchos grupos de investigación españoles que se han reconvertido y, que tras lograr financiación, han dejado de trabajar en otros virus para centrarse en el coronavirus. Por tanto, hay una gran cantidad de información que es necesario difundir.
–La pandemia continúa; ha sido algo que nos ha cambiado la vida. Hemos pasado por escenas, como el confinamiento, que recordaban a una película de ciencia ficción.
–Hemos vivido algo que no habían vivido las últimas generaciones de personas en el mundo. En estos momentos, creo que hay que tener más prudencia de la que tenemos. En los espacios interiores, sobre todo si se está muy juntos, somos muy pocos los que llevamos mascarilla. No hay que olvidar que el Covid sigue matando, si bien es verdad que muchos de los fallecidos que padecen el virus mueren de otras patologías. Lo que ha sucedido, sobre el papel era algo posible, pero nadie creía que fuese a pasar. Hemos sido protagonistas en primera fila de algo que parecía una película de ciencia ficción.
–Aunque los contagios han bajado, ¿cuál es el peligro cara al futuro del Covid?
–El peligro es que surja una variante que se transmita aún con más facilidad y que sea más patogénica, es decir, que produzca problemas más graves y que afecte más a la parte de la población que ahora se ve menos afectada, como son los niños. Cualquier variante de preocupación que aparezca en un lugar concreto llegará al resto del mundo. Eso ya se ha comprobado con las variantes anteriores. Antes o después, surgirán otras nuevas, porque los virus tienen capacidad de mutar con rapidez. Mi opinión es que hay que mantener el cuidado y la prevención ante el Covid.
–¿Qué lección y enseñanzas nos deja esta pandemia?
–Una cosa a destacar es que no por estar en un país desarrollado y avanzado tecnológicamente se está libre de un problema de esta magnitud. Hay que tener claro que cualquier cosa que ocurra en el mundo se globaliza. Otra enseñanza que hay que sacar es que la ciencia en general y la virología en particular nos van a salvar de muchos problemas. Por eso, hay que cuidarlas y financiarlas.
–Llegará un momento en que el SARS-CoV-2 se volverá endémico y conviviremos con él como con la gripe?
–Yo soy virólogo especializado en plantas, pero, por lo que hablo con compañeros que se dedican a los virus en humanos, creo que es difícil saber si el Covid será como una especie de gripe más o si desaparecerá. Es complicado que desaparezca, porque hay mucha población infectada y se transmite muy fácilmente. Por lo tanto, lo más probable es que se convierta en endémico.
–Otro tema de actualidad es el de la viruela del mono. ¿Se abordará este asunto en el congreso de Málaga?
–Sí. Aunque es un tema muy reciente, habrá varias comunicaciones sobre la viruela del mono, sobre todo relacionadas con empresas y con algún laboratorio que han desarrollado de forma muy rápida protocolos para detectar con prontitud y de forma sencilla el virus. Esos métodos diagnósticos rápidos han sido fundamentales para saber qué gente se infectaba.
–¿Cuáles son los principales virus que afectan a las plantas?
–Los virus afectan a los humanos, los animales, las plantas, las bacterias, los hongos e, incluso, a otros virus. Por ejemplo, en el agua del mar hay muchísimos virus. En un mililitro de agua, que no es nada, hay millones de partículas virales. Por tanto, los virus no podían faltar en el mundo de la agricultura. Yo trabajo en el tema de plantas hortícolas como, por ejemplo, el tomate, el pimiento y las cucurbitáceas, que se cultivan en la costa andaluza y, sobre todo, en Almería, que es un ejemplo de enfermedades virales en plantas hortícolas. En Almería surge un virus de plantas nuevo al año. Todas las plantas tienen muchos virus. Al tomate le llega un virus nuevo cada año.
–Igual que hay vacunas para los humanos, ¿hay vacunas, entre comillas, para las plantas?
–No hay vacunas típicas, porque las plantas no tienen sistema inmunitario como los mamíferos, pero están las llamadas vacunas vegetales. Nosotros tenemos ahora un proyecto europeo para luchar contra virus emergentes que han entrado en España y en Europa en los últimos años, que afectan al tomate y a las cucurbitáceas. Uno de los objetivos es hacer vacunas vegetales. La idea es utilizar aislados virales que no son patógenos para inocular a las plantas y que estas, por un mecanismo que no se conoce en detalle, se protejan. Por analogía, lo llamamos vacunación.
–El ataque de lo virus a las plantas provocan pérdidas económicas cuantiosas.
–Hay casos en los que las pérdidas de la cosecha son totales. Y eso tiene una repercusión económica muy negativa.
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