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Todo comenzó el pasado 19 de enero a las 17.30 horas. Agentes del equipo GOA de la Policía Local de Málaga notaron que emanaba un fuerte olor a marihuana de una furgoneta que circulaba cerca de su furgón. Cuando activaron los sistemas acústicos y luminosos, el conductor y único ocupante de la furgoneta se dio a la fuga, iniciándose una persecución policial que dejó algún damnificado por el camino.
Tomó por la avenida Doctor Marañón, para después dirigirse en dirección contraria por la calle Vázquez Díaz y colisionar contra un coche estacionado cuando se incorporaba a la plaza Conde de Ferrería, según señala la Policía Local en un comunicado. En el transcurso de la persecución, otro equipo GOA se sumó y entre ambas unidades interceptaron a la furgoneta y detuvieron a su conductor, un hombre de 40 años y natural de Málaga. En el interior, hallaron 150 plantas de marihuana (según confirmaron en un recuento posterior en dependencias policiales), además de un cuchillo de grandes dimensiones, una porra detrás del asiento del conductor y una navaja en la puerta.
Un policía local del GOA se puso al volante de la furgoneta para trasladarla hasta dependencias policiales, mientras que otros dos agentes uniformados iban en el interior, según informa la Policía. A su vez, dos dotaciones del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local los apoyaban con dos vehículos policiales camuflados.
En el trayecto, concretamente en calle Jorge Silvela, el conductor de un monovolumen les cortó el paso y se dirigió a ellos sin percatarse de que el conductor era un agente. En ese momento, apunta la Policía, los dos efectivos del GOA que se encontraban en el interior de la furgoneta salieron de la misma y procedieron a la identificación y detención del individuo, que fue trasladado en un primer momento a un centro hospitalario tras manifestar que era diabético. En el interior del monovolumen, los policías locales localizaron e intervinieron un cuchillo de sierra, un cuchillo de carnicero y una navaja.
Una comprobación posterior determinó que la furgoneta en la que se encontró la marihuana era propiedad de la mujer del último detenido, un hombre de 46 años y natural de Morón de la Frontera, aunque reside en Málaga.
Tras ser trasladados a dependencias policiales, ambos detenidos fueron puestos a disposición judicial.
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